La Mesa Directiva del comité de circuito Villa María de la Unión Cívica Radical (UCR) explicitó su renovado respaldo al accionar de los concejales Nora Landart y Carlos Gagliano.
En el comunicado enviado a nuestra Redacción, la UCR local informó que “lo hace rechazando de plano la infundada desacreditación que pretende el oficialismo, que se muestra sin reacción y sin respuestas concretas acerca del segundo episodio luctuoso ocurrido en los últimos siete meses en el Hogar de Ancianos que depende de la Administración Municipal”.
“Decimos que pretende porque en su afán de diluir responsabilidades funcionales que le caben plenamente y con toda certeza, el oficialismo no rescata, al menos por gesto de caballerosidad democrática, que el episodio ocurrido hacia fines del año pasado y principios de este no formó parte de ninguna campaña de prensa del bloque de concejales de la UCR. Así se hizo en función de una elemental prudencia frente a un hecho que sumía en el dolor a los deudos de la persona fallecida, pero también ponía en entredicho los mecanismos y sistemas de control que son responsabilidad exclusiva, insistimos, del Gobierno en ejercicio”.
“En este marco, tampoco sirven las maniobras aceleradas para, supuestamente, neutralizar el posible costo político que implica hacerse cargo del siniestro y de su desenlace fatal. La presencia urgente de la responsable del área ante los concejales no estuvo motivada por la falla en las responsabilidades, en los detectores de humo y en otra serie de detalles. Estuvo movida por un cálculo casi inescrupuloso para evitar que se conozca que el Gobierno padece de estos vacíos de gestión a cada paso. Sólo que en éste, lamentablemente, se sufre la desaparición física de dos personas adultas mayores a quienes, en el colmo del cinismo, se pretende inculpar de ser fumadoras compulsivas o poco más o menos”.
“No especulamos con la muerte, perseguimos la verdad de este asunto. No nos serviría ni a nosotros ni a la comunidad hallar un culpable que se convierta en el chivo expiatorio de una enorme dilución del Estado municipal en los asuntos en que se juega la vida. Nos interesa, porque eso es lo correcto, establecer y deslindar las responsabilidades que correspondan”.
“Estamos ante dos hechos de corte policial, idénticos entre sí, que, más temprano que tarde, terminarán llevando al municipio a los estrados tribunalicios. Es hora, señores y señoras del Gobierno municipal, de asumir cabalmente el juramento que han hecho al asumir sus respectivos cargos”.