Al margen del resultado que todos lamentan por el desarrollo del partido del domingo, ante Desamparados, dos aristas muy importantes quedaron de las últimas producciones del equipo, sobre todo desde la llegada de Marcelo Bonetto como técnico: existen algunas cuestiones defensivas por mejorar y se resaltan actuaciones elogiables en ataque.
En cuanto a lo primero, se sabe que recién este fin de semana pudo debutar el refuerzo -remplazante de José Figueroa- Gastón Carabajal, quien hizo dupla de central con Nahuel Caler sin mucho tiempo de trabajo previo.
Es que Caler sufría una molestia que lo marginó de las últimas prácticas, por precaución. No obstante, mientras retornaba Leandro Peñaloza después de la suspensión, quedó en evidencia que faltan corregir algunos detalles en el fondo.
Por marcar muy en línea los dos centrales, el equipo villamariense sufrió el gol decisivo (el segundo) en Córdoba. Y el domingo, por el contrario, los últimos hombres retrocedieron sin alternancia para cortar los avances, en grandes pasajes del partido, lo que dio espacios para el ataque sanjuanino.
Al mismo tiempo, los pelotazos cruzados fueron un problema en esa defensa villamariense, que padeció su carencia de concentración previo a los goles rivales.
Claro que también vale resaltar que la zona de volantes no tuvo la contención esperada en el medio ni la tranquilidad de cuidar la pelota como lo hizo en otros partidos, por eso tal vez la defensa tuvo más trabajo.
Ante Desamparados, cuyo técnico conoce muy bien los errores y las virtudes de Alumni, el mediocampista César Ariel Quiroga -la figura del equipo- se vio muchas veces ahogado por la marca y el juego debió recalar en sus compañeros del medio, que no pesaron como el propio puntano.

@Enchufados

Pero más allá de las falencias que se visualizaron, Alumni tuvo nuevamente otra gran actuación de su dupla de delanteros, Facundo Basualdo - Alexander Lucero, lo que seguramente deja tranquilo a Bonetto, en tiempos donde pueden regresar Carlos Herrera (suspendido) y tal vez Víctor Rena (lesionado).
Basualdo y Lucero jugaron juntos por última vez en Mendoza, donde el equipo villamariense venció 5-2 a Gimnasia. Y allí la rompieron a pura velocidad y efectividad.
Esta vez, nada menos que contra el puntero, ambos volvieron a ser compañeros y brillaron.
Claro que no todo fue felicidad para ellos. Basualdo dijo: “Más allá de los goles, estoy triste porque nos podríamos haber quedado con los tres puntos”.
El “Cuqui” (como le dicen sus compañeros) lo lamentaba bastante porque había marcado los dos primeros tantos del elenco villamariense.
Lucero, en tanto, reconoció: “Con Basualdo nos entendemos bien, siempre tenemos que estar cerca porque cualquier rebote o algo nos favorece por nuestra velocidad, al igual que con ‘Falucho’ (Herrera)... Siempre, tanto con ‘Cuqui’ como con Herrera o quien sea, hay que tratar de entedernos y hablarnos, que es fundamental”.
Precisamente, cuando “Falucho” fue titular también exhibió su ascendencia en el equipo, a punto tal que lleva marcado cuatro goles en cinco partidos (en otros dos estuvo suspendido) desde su retorno al club, proveniente de Huracán de Tres Arroyos.
Herrera quedó ahora a disposición del técnico para el próximo partido, ante Maipú, en Mendoza. Y si este encuentro se disputa el martes 10 del corriente (ver aparte), también estaría en plenas condiciones de regresar Víctor Rena, goleador del equipo (6 tantos), uno de los más experimentados y con diferentes características del resto, por poderío en el juego aéreo.
Rena sufrió una pubalgia y lleva una rueda entera sin jugar (su último choque fue cuando marcó un gol contra Maipú, en la “Placita”), aunque el domingo sumó algunos minutos en el partido preliminar que el remanente disputó contra el equipo de la Liga Villamariense.
A esto hay que sumarle que Raúl Maldonado, pese a no jugar seguido, trabaja sin chistar a la espera de su chance.
En síntesis, Bonetto tiene “un lindo problema” para armar la estructura de ataque. ¿Cambiará el sistema para poner a la mayoría de los delanteros que pueda? Por ahora no se sabe. Primero apostará a mejorar los movimientos que no surtieron efecto en el aspecto defensivo.

@Con poco peso

Una información que surgió ayer refleja claramente que tanto Alumni como quienes lo representan en el Consejo Federal no tienen el peso suficiente como para defender sus posturas: Ahora el partido contra Deportivo Maipú sería el martes 10 del corriente y no el próximo jueves, como querían los dirigentes villamarienses.
Desde Mendoza se aduce que no se podrá jugar el fin de semana porque allí se realiza la Fiesta de la Vendimia y no hay seguridad.
En el Consejo Federal de AFA se entendió el pedido, pero en lugar de mandar a jugar un jueves, como lo hicieron cuando Alumni debió enfrentar a Juventud Antoniana de Salta y detalló sus inconvenientes en tiempos de Festival de Peñas, esta vez “escucharon” un poco más a los mendocinos y le darían con el gusto de jugar el martes posterior a la fecha.
El representante de la Región Centro, en el Consejo Federal, es nada menos que el presidente de la Liga Villamariense, Carlos Airaldi, quien al parecer no pudo cambiar el rumbo de esta historia, que no hace más que demostrar la poca seriedad de ese organismo de la AFA.
En síntesis, tanto salteños como mendocinos, cada uno en diferentes situaciones con respecto a Alumni, parecen tener más peso.
El presidente del club “fortinero”, Guillermo Morelatto, mostró ayer su fastidio. “Estamos muy mal porque allá nos llevan como quieren”, se lamentó.
Hoy finalmente se conocerá lo que está prácticamente sellado: Alumni jugaría en Mendoza, ante Maipú, el martes 10, y en Jujuy, ante Talleres de Perico, el lunes posterior.