“Brascó tenía consignas claras, renegaba de los sommeliers por su exuberancia. Les reclamaba que lo hacían difícil y si la gente lo ve difícil, se aleja en lugar de acercarse. El vino te habla de manera sencilla”.
Así, Sebastián Valfré, titular de la vinoteca de calle Mitre 156, recordó al recientemente desaparecido bon vivant y comunicador Miguel Brascó, quien entre sus máximas tenía:
“El mejor vino es el que más le gusta a uno”.
“El problema de los vinos es describirlos, no hacerlos. Lo difícil es venderlo y para ello hay que comunicarlo. Para explicar un vino hay que saber escribir, hay que tener dominio del idioma y no del vino”.
“Cuando te dicen que un vino tiene aromas a cuero de montura sudada, te están macaneando”.
Valfré recuerda la visita del crítico gastronómico más reconocido de la argentina que se fue a los 88 años, el pasado 10 de mayo, mientras muestra una fotografía junto a él en la cava del local.
El titular de la firma celebra este mes 91 años y hace gala de contar con cinco generaciones de la familia, desde los inicios de la vinoteca.
“Yani” ofrece en su diálogo un mapa de los vinos. Encuentra los detalles de cada terruño para hacer conocer el paisaje que rodea a las uvas, el clima y el follaje de la vid.
Durante cada viernes y sábado de agosto, desde las 19, en el marco de celebrar los 91 años de la firma con la quinta generación de la familia en el rubro, ofrece vinos de alta gama para degustar entre los clientes y compartir esta experiencia, este viaje que emprende al descorchar una botella.
El comienzo
La casona vinoteca de calle Mitre 156 fue fundada en 1923 por don Sebastián Valfré, inmigrante italiano de la zona de Piemonte. La recepción muestra más que vinos y barricas, expositores de bebidas, licores y destilados. Al traspasarla se puede acceder a una cava majestuosa, un ambiente cuidadosamente adaptado, para guarda de botellas de la mejor selección. Para los amantes del vino, el más confortable espacio de los sueños, quizás.
La tradición de don Sebastián fue continuada por su único hijo don Antonio Valfré, y en la actualidad es conducida por su nieto, Sebastián Antonio, quien al igual que sus antecesores, ve en el vino, más que un objeto comercial, una pasión y la más noble de las bebidas.
“El vino bebido con moderación es la mejor de las medicinas”, citó Valfré al químico francés Louis Pasteur.
Y de esta frase, cuestionó la nueva ley de “alcoholemia cero” implementada en la provincia de Córdoba, por ser una “medida extrema”, aunque rescató que “se debe asumir una responsabilidad social y si se bebe, no conducir”.
Club de vinos
Si bien el campo de acción de la Vinoteca Valfré trasciende las fronteras de Villa María, extendiéndose al resto de la provincia de Córdoba y a Santa Fe, La Pampa y parte de la provincia de Buenos Aires, su titular se excusó en que "las cofradías se sustentan con mayor población", a la hora de responder a la existencia de un club del vino o club de vinos. “Son espacios muy interesantes, pero que requieren mucha dedicación y se necesita más población local, un universo más grande y mucha dedicación, mucha”, remarcó.
Consumo en baja
Valfré insistió en que “el consumo de vinos viene en baja, decayendo muy despacio, pero no se detiene. Sin embargo, los clientes buscan cada vez más calidad. Hemos crecido en ese aspecto y abierto espacios de comparación de vinos, haciendo protagonistas de una reunión a vinos para degustar”. “Se segmentó para bien”, aseguró.
En ese sentido, explicó que “desde el Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV) se emprenden campañas para revertir esta caída, a veces se puede no coincidir, pero se hacen. Ahora se busca implementar el uso de envases bag in box, que son dos recipientes de bolsas de plástico que cuentan con una válvula que evita el ingreso de aire, lo que es caro y desde mi óptica no adecuado. Tiene fecha de vencimiento, o sea que es un contenedor rápido, y no es lo mismo que compartir por tradición una botella de vidrio en la mesa, pero argumentan que es más seguro y más práctico para su almacenaje”.
Los premios
“Los premios a vinos argentinos son buenos porque reimpulsan el consumo, la buena elección, despierta interés, renueva. Es para nosotros un mejor marketing”, afirmó Valfré ante la consulta de bodegas que obtuvieron distinciones internacionales en los últimos tiempos.
Las mujeres gustan
Para “Yani” es notable como “las mujeres comenzaron a explorar más en vinos”. Describió que “si bien se inician muchas primero con un rosé, y la mayoría pasa de a poco con blancos dulces, avanzan luego a probar cepas bajas en taninos como un pinot noir y se atreven más tarde a un malbec. Pero se nota que el vino despierta su interés”.