“Miren, el cemento está fresco. No entiendo cómo la Municipalidad informa que las obras en el barrio están terminadas”, dijo uno de los vecinos del barrio Vista Verde.
Ayer a la tarde, convocaron a los medios para recorrer el lugar y mostrar lo que se hizo y lo que falta de hacer, a los fines de evitar que ante la llegada de la época estival, se repita la inundación que se llevó el esfuerzo de varios sectores de la ciudad y de Villa Nueva.
Encabezados por Pablo Longo, presidente del centro vecinal, se concentraron en un espacio público de ese sector de la ciudad, desde donde dijeron que a seis meses de la devastadora crecida siguen “sin respuestas”.
“Dicen que está todo terminado, pero le podemos mostrar que todavía están en obra”, señalaron.
“Nosotros en varias reuniones que tuvimos con el intendente, pedimos que las obras se enmarquen dentro de una política de Estado y que no se pongan parches para contarlo en los diarios antes que a los vecinos”, dijo.
“Vemos que se hacen obras, pero no tenemos información detallada. Queremos un informe detallado para que lo que pasó en febrero no vuelva a ocurrir”, agregó.
Ven, por ejemplo, que el terraplén está terminado, pero no saben “cómo está rellenado para tener seguridad de que va a aguantar el agua”, agregaron.
Cuestionan también la falta de nivelación de los desagües sobre la calle río Suquía. “En esa zona, con la lluvia de diciembre, tenían el agua en la puerta de las casas”, informó.
La primera parada del recorrido realizado ayer fue precisamente el desagüe de la esquina Suquía y Paraná, que servirá para desagotar el agua que acumula el zanjón de la primera calle mencionada. La obra no está concluida.
La segunda parada fue en el terraplén, donde observaron dos deficiencias: las tapas precarias que no cubren con precisión los ductos que van de la calle al río y la falta de nivelación del espacio paralelo al curso de agua.
El sueño de volver
La tercera parada fue el domicilio de uno de los vecinos, Marcelo Biondi, quien aún no pudo volver a su casa por no tener concluidas las reparaciones de los daños de la inundación.
“Yo tuve un metro de agua y me dejó sin nada. Ni un mueble, ni un papel, ni una foto. Lo voy haciendo despacito porque no tenemos respuestas”, dijo el vecino que tiene su vivienda en la calle Limay. Su vecino, Guillermo Venturi, muestra la marca del agua que superó el metro y medio dentro de su casa. Todavía sigue reparando las paredes.
Procrear que no llega
Los vecinos informaron que los créditos prometidos a través del Plan Procrear aún no llegaron. “Queremos que quede claro. A nosotros nos dijeron que el interés de esos préstamos era del 7%, pero hay confusión. A algunos de los pocos vecinos que les dieron turno, les hablan de un 18%, dijo Longo, al recordar que el préstamo para los vecinos de ese sector estaba enmarcado en una línea especial para damnificados por la inundación.
“El otro problema es que el Procrear va a ir de acuerdo al nivel de ingresos de cada hogar. Nosotros tenemos vecinos jubilados que no llegan a cubrir un monto y que lo necesitan para reparar la casa”, agregó otro vecino.
“En mi caso, yo me endeudé, saqué créditos, usé la tarjeta, porque tenía que volver a mi casa”, aseveró otra vecina.
Una tercera relató que para reparar la pared que se le cayó por la inundación, tuvo que vender su moto, que era el único vehículo con el que contaba.
Es notable cómo el daño que provocó la crecida dejó huellas en las casas, las calles y en la vida de los vecinos. Sólo quieren respuestas para “volver a vivir tranquilos”.