Desde comienzo de mes, el Bibliomóvil ya visitó 18 escuelas rurales, a las que les dejó, en carácter de préstamo, 562 libros.
Esta iniciativa responde al programa que lleva adelante la Biblioteca Municipal y Popular Mariano Moreno, de Villa María, y que se denomina “Libros que Viajan a Escuelas Rurales”.
Anabella Gill, directora de ese espacio municipal, explicó que esto se lleva a cabo desde principios de agosto y que hasta fin de año se van a visitar, en tres ocasiones cada una, unas 30 escuelas rurales.
“Los chicos de escuelas de acá tienen a 10, 20, 30 cuadras la biblioteca, que la usen o no es otra cosa. En cambio, las comunidades rurales no tienen esta oportunidad por lo que intentaremos sostener el servicio bibliotecario con un giro cada 15 ó 20 días por cada lugar, siempre hablando de lo que sería ideal”, destacó Gill.
La funcionaria destacó que “es algo mágico” poder llevar a cabo la iniciativa y que se llevó una sorpresa, para bien, en cuanto a la realidad con la que se encontró sobre docentes y material bibliográfico en las precarias escuelas.
Pero no sólo se trata de que el vehículo equipado con material bibliográfico visite los lugares, sino que el equipo que visita las escuelas es numeroso y pasa todo un día realizando, primero, una explicación a los niños sobre cómo funciona el servicio, y luego la realización de actividades de promoción de lectura y talleres de distintos tipos, como producción y espectáculos de títeres, música, taller de ajedrez y arte en papel, entre otros.
“Hay chicos que nunca habían visto títeres o un espectáculo musical y se quedan helados, los disfrutan muchísimo, se asombran”, destaca Gill, quien asegura que “las maestras nos dicen que para muchos es la primera vez que hacen o reciben actividades de este tipo”.
El Bibliomóvil debe ser devuelto a fin de año y, sobre el uso que se le está dando, Gill se manifestó más que conforme. “Es más, la Comisión Nacional de Bibliotecas Populares (Conabip) está sorprendida de la dinámica que le estamos dando, esto es gracias a que somos una institución grande donde un grupo puede salir a trabajar y otros quedarse acá”, reconoció.
La biblioteca “Puerta a Puerta”, en proceso experimental
Gill reveló que están llevando a cabo un proyecto experimental de servicio de biblioteca “Puerta a Puerta”, destinado a personas de la tercera edad o con algún tipo de limitación física. “Para aquellas personas a las que se les dificulte llegar a la biblioteca, esto sería un delivery de libros”, contó.
“El móvil te da la posibilidad de llevarles y que puedan elegir, pero ese servicio lo vamos a sostener con o sin Bibliomóvil”, aseguró. “No la hemos largado todavía a la iniciativa, pero aun así ya tenemos a 15 personas que están haciendo uso de la misma mientras definimos los detalles, como los tiempos de lectura”.
Gill explicó que quienes quieran acceder, sin costo alguno, deben ser socios de la biblioteca y comunicarse con la misma.
“La idea es poder trabajar con el acercamiento al lector, por lo que si no pueden venir, se los vamos a acercar, pero Villa María es muy grande, tenemos mucho trabajo por hacer”, reconoció.