De­bi­do a la ex­po­si­ción exa­ge­ra­da al sol que ha pro­vo­ca­do que el 30% de la po­bla­ción blan­ca en el mun­do con­trai­ga cán­cer de piel, los der­ma­tó­lo­gos lo con­si­de­ra­ron du­ran­te la pre­sen­ta­ción de un sis­te­ma de pre­ven­ción.

"No tie­ne sen­ti­do de­cir có­mo, dón­de y cuán­do de­be usar­se el fil­tro so­lar por­que no es un pro­duc­to ma­si­vo y su ad­mi­nis­tra­ción de­pen­de del es­ta­do de la piel de ca­da per­so­na, de su ge­né­ti­ca, su me­ta­bo­lis­mo y sus há­bi­tos", di­jo Ed­gar­do Choue­la du­ran­te la pre­sen­ta­ción en Bue­nos Ai­res de un nue­vo sis­te­ma pa­ra pre­ve­nir en­fer­me­da­des de la piel. 

El der­ma­tó­lo­go ex­pli­có que "el Car­ci­no­ma Ba­so­-Ce­lu­lar (CBC) afec­ta al 30% de la po­bla­ción blan­ca mun­dial y uno de los fac­to­res que pre­dis­po­nen a con­traer esa for­ma de cán­cer es la ex­po­si­ción so­lar pro­lon­ga­da". 

Mien­tras que el ti­po de piel, te­ner an­te­ce­den­tes de que­ma­du­ras so­la­res, la dis­mi­nu­ción de la ca­pa de ozo­no y la lo­ca­li­za­ción geo­grá­fi­ca en la que uno se en­cuen­tre son otros de los de­sen­ca­de­nan­tes del cán­cer de piel. 

Otra for­ma de cán­cer de piel es el Car­ci­no­ma Es­pi­no-Ce­lu­lar (CEC), que ha­ce que las per­so­nas que lo han con­traí­do ten­gan el 52% de po­si­bi­li­da­des de te­ner otro en los pró­xi­mos cin­co años. 

En tan­to, el Me­la­no­ma (MC) au­men­tó en las úl­ti­mas dé­ca­das más que cual­quier otro ti­po de cán­cer, se­ña­ló Choue­la, que in­di­có que el mé­to­do más efi­caz pa­ra pre­ve­nir las en­fer­me­da­des de la piel es el cui­da­do de "el ór­ga­no más ex­ten­so del cuer­po hu­ma­no". "Cui­dar­se y ha­cer­se ver por quien pue­de re­gis­trar año a año me­dian­te un che­queo pre­ven­ti­vo el es­ta­do de la piel, esa es la in­di­ca­ción que le doy a los pa­cien­tes", acla­ró el es­pe­cia­lis­ta, pa­ra quien el fil­tro so­lar de­be­ría ser "un me­di­ca­men­to más, al que se de­be lle­gar des­pués de una eva­lua­ción".

Pa­ra el der­ma­tó­lo­go Ro­ber­to Re­ta­mar, "la fo­to­pro­tec­ción es una de las for­mas más im­por­tan­tes de pre­ven­ción de la piel; ade­más de há­bi­tos sa­nos co­mo no fu­mar o evi­tar el al­co­hol".  "Hay que cui­dar­se y los fac­to­res in­trín­se­cos son com­pli­ca­dos de evi­tar­ (gé­ne­ti­cos y me­ta­bó­li­cos), pe­ro po­de­mos con­tro­lar los há­bi­tos ex­ter­nos co­mo el sol, el ci­ga­rri­llo y el al­co­hol.