“La idea de trabajar sobre este tema se dio en base a las inundaciones que se sucedieron recientemente en la ciudad y porque tenemos compañeros que habían sufrido los efectos de la misma”.
“Las inundaciones pueden causar pérdidas materiales y enfermedades que pueden dañar la salud de una persona”.
“La inundación en Villa María se produjo por causa del hombre. Se empezó a llenar el dique Piedras Moras para el turismo y luego se desagotó, porque se empezaron a enviar 400 centímetros cúbicos de agua por segundo al río Ctalamochita”.
“Esto podría prevenirse tratando de desagotar el dique más lentamente”.
Antonela, Ariadna y Brunela (foto 3). Sexto grado de la Escuela Remedios de Escalada (Tío Pujio). Proyecto “¿Infancia virtual?”
“En el aula empezamos a hablar sobre que los chicos viven rodeados por la tecnología, entonces nos empezamos a preguntar por qué están siempre en contacto con ella”.
“Investigamos entre nuestros compañeros y llegamos a la conclusión de que la mayoría de ellos dependen de la tecnología digital y de las redes sociales para entretenerse”.
“El problema de usar la tecnología todo el tiempo es que puede generar dolores en la vista, dolor de cabeza o alguna otra enfermedad”.
“Nos visitó una psicopedagoga, Marianela Mondino, nos hizo trabajar en grupos y nos habló de la ‘Generación Z’, que serían los chicos de ahora que nacen rodeados de tecnología”.
Gabriel y Facundo (foto 4). Quinto grado de la Escuela Dalmacio Vélez Sarsfield (Arroyo Cabral). Proyecto “¡Alerta! Basura tecnológica. ¿Dónde está?”
“Empezamos trabajando con los distintos tipos de contaminaciones, ambiental, sonora y visual, y después nos surgió la idea de trabajar con basura tecnológica, porque es muy contaminante en el mundo”.
“Nos surgió el problema de saber cuál es el destino que le daban los habitantes de nuestro pueblo a la basura tecnológica. Para saber esto hicimos una encuesta, tabulamos los datos y obtuvimos dos conclusiones”.
“Una fue que la mayoría de las personas tiran esa basura a los tiraderos o basurales y es quemada a cielo abierto y la otra que un bajo porcentaje de los habitantes la recicla en sus hogares”.