El consumo de drogas es un flagelo contra el que se lucha permanentemente desde distintos frentes, mediante instituciones y organizaciones que buscan el rescate de consumidores o que trabajan en la prevención. En ese sentido, la Municipalidad de Villa María cuenta con un espacio para la atención y tratamiento de personas que han tenido o tienen un vínculo problemático con sustancias adictivas: la Casa de Medio Camino.
Actualmente, según informó Silvina Pons, coordinadora del área de Salud Mental del Consejo Municipal de la Salud, son 25 las personas que asisten a este Centro Municipal de Atención y Prevención de las Adicciones que se ubica en el predio cedido por Funder, ubicado en ruta 9, kilómetro 552.
Pero, además de las personas que asisten a la sede, la atención de la Casa de Medio Camino alcanza a un grupo estimado de 90 personas más, entre familiares y población con problemas de consumo que reciben asistencia en tratamiento ambulatorio y abordaje territorial.
Pons informó que en este centro, que está destinado a personas de entre 14 y 49 años y que funciona de lunes a viernes, de 8 a 12, “en lo que va del año 2014, estamos realizando una nominalización de personas con este padecimiento, a fin de lograr datos nominales y estadísticos que nos permitan plantear estrategias más adecuadas, aun a la población de nuestra ciudad”.
Talleres de todo tipo
Según explicó la funcionaria, las instancias de trabajo y el abordaje que se le da a los pacientes son múltiples, como así también el equipo de profesionales que se desempeña en el lugar, específicamente capacitados, con características de multidisciplinariedad, y conformado por un psiquiatra, dos psicólogos, una médica especialista en Toxicomanía, una enfermera y talleristas.
Justamente son los talleres el elemento fundamental con el que trabajan, ya sean de rehabilitación, terapéuticos o psicoeducativos. “Se realiza asistencia individual a través de tratamiento psicológico y psicofarmacológico, también se brindan talleres a familiares en la sede del centro de salud mental y recientemente se ha fortalecido el trabajo en territorio de captación y seguimiento de casos, adhiriendo plenamente a la Ley de Salud Mental Nº 26.657, para lo cual contamos con un equipo que trabaja en los barrios realizando visitas domiciliarias los cinco días de la semana”, detalló Pons.
Además, se realizan talleres de alfabetización, deporte, cocina, literatura, arte, huerta y fotografía.
La licenciada consideró que “la Casa de medio Camino es una pieza clave en el abordaje de la problemática de las adicciones porque, además de funcionar como hogar de día, también es la institución de referencia y enlace para la efectiva inclusión social a través de redes entre los centros de salud, la comunidad y quienes padecen esta problemática”.