El patio del Jardín de Infantes “Dalmacio Vélez Sarsfield” del barrio Roque Sáenz Peña luce triste, apagado y lastimado, pese a las 23 sonrisas que por ahí juegan diariamente. 

Por eso, un grupo de madres de los niños que asisten a la institución educativa ubicada en la calle Estados Unidos 775, decidió poner manos a la obra para recuperarlo o al menos eso están intentando.

La intención es conseguir los elementos necesarios con los que puedan arreglar y pintar ese espacio que los niños cada vez pueden usar menos, por el deterioro que sufre. “Nosotros sólo queremos pedir colaboración para devolverle el color, no quejarnos o hacer un reclamo”, aclararon, de entrada, docentes y madres.

 

“Un tarrito de pintura o un pincelito”

 

“Tenemos deteriorado el arenero, por eso está con yuyos, hace un tiempo que no lo usamos”, comentó Vanessa Bianciotto, directora y maestra del jardín que depende del Gobierno de la Provincia de Córdoba. “Y yo, como mamá, considero peligroso eso”, señala Candela Gatica, madre de uno de los niños, mientras señala la pared fisurada lindera al espacio con arena.

“Lo que más nos gustaría renovar es la pintura, tanto de las paredes como de los juegos, darles algo de vida, alegrarlo, volver a habilitarles el arenero”, anhela Vanessa. 

El estado de las hamacas y elementos lúdicos en el espacio verde están notablemente gastados, y las paredes prácticamente no muestran rastros de pintura alguna entre la humedad y la suciedad.

Teniendo en cuenta que el jardín no cobra cuota, sino que “pedimos una colaboración mensual, y cada uno da lo que puede, pero tampoco se le cierran las puertas al que no puede dar nada a la cooperadora”, señaló Vanessa, los ingresos los generan mediante rifas. 

Es por ello que este grupo de unas seis madres reconocen que “a la cooperadora no le queremos ni podemos sacar dinero para esto porque tienen que destinar eso para otros cosas”. A partir de eso es que decidieron salir a golpear puertas para conseguir lo necesario.

“Hay mucha gente que estudió acá y le tiene mucho cariño a la escuela, entonces por eso queremos difundir el pedido, para que el que pueda colabore con un tarrito de pintura o un pincelito”, mencionó Gatica.

Las madres contaron que golpearon puertas de varios comercios o pinturerías para pedir donaciones, pero que por el momento, sólo algunas respondieron y negativamente.

“Nosotros queremos que nuestros hijos tengan un lugar lindo donde jugar, mano de obra va a haber, porque las mamás estamos dispuestas a colaborar si conseguimos el material, o mi esposo también es albañil y nos va a ayudar”, dijo la mamá.

Según pudieron averiguar las madres, hace muchos  años que el jardín no recibe algún tipo de renovación desde el punto de vista edilicio, salvo la pintura de la sala de ingreso que pudieron hacer con dinero de la cooperadora el año pasado.

Para quienes deseen colaborar, pueden dirigirse al jardín o contactar al 154174999.