Con los alegatos de las partes y el dictado de la correspondiente sentencia, concluirá hoy el juicio que se le sigue al abogado Mariano José Ludueña, imputado como presunto coautor de “usurpación” por un hecho ocurrido hace casi cuatro años en la ciudad de Oliva.
En principio, el proceso oral y público iba a finalizar en la víspera, pero como la recepción de las pruebas testimoniales se demoró más de la cuenta, a lo que incluso se sumó un careo, la definición del debate se postergó 24 horas.
Así, para esta jornada está previsto que emitan sus conclusiones el fiscal de la Cámara del Crimen de Villa María, Francisco Márquez; el representante de la Querella (acusador privado), Tomás Aramayo, y finalmente la Defensa, que es ejercida por el propio Ludueña.
De no producirse una nueva dilación, pasado el mediodía se conocerá el veredicto al que arribe la jueza Silvia Saslavsky de Camandone, quien preside el tribunal unipersonal y es asistida por la secretaria Gabriela Sanz.
En la víspera, en tanto, se receptaron cuatro testimonios, entre ellos el del vecino olivense Daniel Eduardo Fiori, quien denunció a Ludueña y a Raúl Pedro Quinteros de haberse apropiado ilegalmente de la casa en la que vivía junto a su tía Faustina Matilda Osse, de 84 años de edad.
Cabe aclarar que Quinteros, un tornero jubilado de 62 años, es hijo de la octogenaria. El 8 de noviembre de 2010 viajó desde Buenos Aires (donde está radicado) hasta Oliva para hacerse cargo del inmueble, por lo que decidió internar a su progenitora en un geriátrico y luego desalojó a Fiori.
Fue entonces cuando se produjo un incidente verbal que rápidamente se convirtió en una causa judicial, ya que el sobrino de Osse llamó a la Policía, mientras que Quinteros hizo lo propio con el abogado olivense.
Sin embargo, Fiori fue expulsado de la vivienda, tras lo cual formuló una denuncia contra Quinteros y Ludueña, quienes pocos después fueron imputados por el fiscal de Oliva como presuntos coautores de “usurpación”, un delito que es reprimido con prisión de seis meses a tres años.
Sin embargo, el hijo de Osse no comparece en este juicio porque oportunamente solicitó una “probation” (suspensión del juicio a prueba), por lo que sólo Ludueña debió sentarse en el banquillo de los acusados, pero con la particularidad que también ocupa el estrado de la Defensa, ya que se representa legalmente a sí mismo.
Durante la instrucción de la causa, Fiori se constituyó como querellante particular, con el patrocinio del abogado cordobés Tomás Aramayo.
Además del denunciante, también declararon ayer su hermana y dos efectivos policiales de Oliva, que tomaron parte de las actuaciones el día en que se produjo el incidente.
En otro momento de la audiencia de debate de la víspera, y ante los dichos contrapuestos de Ludueña y la hermana de Fiori, se dispuso un careo entre ambos. Fue así que el acusado y la mujer confrontaron verbalmente en la sala, aunque los dos se mantuvieron en sus dichos.
Concluida la etapa de recepción de pruebas, la jueza dispuso un cuarto intermedio hasta hoy a las 9 para escuchar los alegatos.
LAS FOTOS:
1- El conocido abogado olivense Mariano José Ludueña tiene un doble rol en este particular juicio: comparece como acusado y como defensor de sí mismo
2- La parte acusadora está integrada por el fiscal Francisco Márquez y el letrado cordobés Tomás Aramayo como representante del querellante Daniel Fiori
3- La jueza Silvia Saslavsky de Camandone escuchará hoy los alegatos de las partes y, de no producirse una nueva demora, dictará sentencia poco después del mediodía