El representante de boxeadores Osvaldo Rivero y otras dos personas fueron asaltados y golpeados por falsos policías que los detuvieron en una ruta cercana a Rosario y les robaron más de 100 mil pesos y dólares que trasladaban para la pelea que se celebrará hoy en el Anfiteatro Municipal de esta ciudad entre Omar Narváez y el mexicano Felipe Orucuta, informaron fuentes policiales.
El hecho, que se conoció en la tarde de ayer, ocurrió el miércoles en el kilómetro 19 de la ruta A-012, a la altura de la localidad santafesina de Soldini, cuando Rivero y sus acompañantes, el periodista deportivo Edgardo “Morresi” Rosani -quien hace prensa de las actividades de Rivero- y el supervisor de la Organización Mundial de Boxeo (OMB) fueron detenidos por un control de falsos policías cuando viajaban desde Buenos Aires a bordo de una camioneta Porsche 4x4, agregaron los informantes.
De acuerdo a la investigación, eran tres hombres con vestimenta policial y conos separadores de tránsito apostados en la ruta, quienes finalmente se llevaron computadoras, celulares y maletas con dinero que transportaban las víctimas.
El testimonio de la víctima
"Eran tres personas, nos hicieron bajar, a un amigo le pegaron un culatazo en la cabeza y lo hicieron entrar (en un vehículo), después intentaron conmigo pero zafé", contó Rivero.
Según relató el mánager del boxeador chubutense Omar Narváez, lo que vivió "era como estar en un sueño, porque pensábamos que eran policías".
"En segundos tuve que decidir si iba a ir con ellos o si tenía que morir en ese momento, me pegaron muchos culatazos, pero me pude zafar", añadió en declaraciones a Cadena 3.
Rivero se resistió a subirse a un vehículo con los falsos policías y tras ser golpeado escapó por la ruta hasta encontrar un camionero que lo ayudó.
Un rato después intervino la guardia de seguridad rural "Los Pumas" de Santa Fe, quienes trasladaron a las víctimas hasta un hospital de la localidad santafesina de Roldán, donde radicaron la denuncia.
Los empresarios contaron que viajaban desde Buenos Aires a Córdoba y desviaron por la ruta A-012, con el objetivo de evitar ingresar a Rosario y tomar más adelante la autopista que une a esta ciudad santafesina con Córdoba.
No hay detenidos.