Ayer por la mañana el destacado bailarín Iñaki Urlezaga brindó una conferencia de prensa en el Salón Blanco del Palacio Municipal, en el marco de su visita a la ciudad con el ambicioso proyecto Danza por la Inclusión.
Tanto el domingo como anoche, Urlezaga actuó en el Teatro Verdi en forma gratuita y junto a un cuerpo de 46 bailarines seleccionados mediante audiciones en todo el país. La iniciativa, impulsada por el Ministerio de Desarrollo Social de la Nación, fue auspiciada por la Universidad Popular.
Por ello, el artista fue recibido por el director de Cultura, Sebastián Capurro, y el jefe de Gabinete, José Carignano, quien había asistido a la clínica gratuita que ofreciera el domingo por la mañana en el Salón de los Deportes.
Iñaki, tras agradecer al público y a la organización del evento, comentó acerca de la propuesta que iniciara el año pasado con un par de talleres en Entre Ríos y, debido a “la avidez del público”, desde la cartera nacional se extendió hacia todo el país.
“El proyecto viene a llenar un hueco muy importante respecto a la danza. En 200 años de historia nunca se había hecho algo así”, puntualizó.
Asimismo, destacó que uno de los objetivos a perseguir es “conformar un cuerpo de 60 bailarines”. De todos modos, añadió, la propuesta tiene “un fin educativo y de poder llegar al interior del interior, que si no fuera por el Estado, es muy difícil que un privado apueste por un espectáculo de esta naturaleza. En general se llega a ciudades como Rosario o Córdoba. Para ir al sur, las distancias son muy largas y casi no hay teatros. Entonces se deben acondicionar estadios o canchas de básquet para algo así”, explicó.
Consultado sobre las condiciones que presentó el Teatro Verdi, apuntó: “Casi nunca llego el día antes para ver la sala antes del estreno, sin toda la técnica montada. Pero tiene las medidas justas para la danza. De todos modos, es el público quien decide y va a disfrutar cuando tiene un buen espectáculo delante”.
“Tinelli no fomenta nada”
Interrogado sobre el interés que tienen los jóvenes en incorporarse a los estilos clásicos y contemporáneos, respondió que “históricamente Argentina tiene muchos y muy buenos bailarines, con más varones que mujeres, aunque no sé por qué. Y actualmente no hay diferencia entre la preferencia por la danza clásica y contemporánea; hace 50 años puede ser que la hubiera”.
Respecto a los concursos de baile en programas como Showmatch, indicó que “en el caso puntual de Tinelli, no fomenta nada en materia de danza clásica. En ritmos de bachata puede ser, porque lo puede poner de moda”.
Espectáculo. Vale recordar que el espectáculo brindado por Urlezaga estuvo compuesto por cuatro piezas: “Cantares” (sobre música de Ravel), “La celebración” (variaciones creadas por el coreógrafo Frederick Ashton), “El talismán” (inspirada en el clásico de Ricardo Drigo) y “Claro de luna” (suite de Debussy y coreografía de Giuseppe Della Monica).