Imagínese una bombaque ha estallado en mil pedazos de rock crudo, furioso y cuya onda expansiva provoca que los cuerpos se enciendan simultáneamente.
Sopló el Fantasma presentó el sábado pasado en la pista de Quinoto (que ya debería ser considerado el lugar más propicio para la escena rockera), su segunda placa “Tierra eléctrica”, ante un considerable marco de público.
Con evidentes reminiscencias a “powers trío” como Divididos, los hermanos Vasconi (Coco en guitarra incendiaria y Darío en los sostenidos parches) y Pablo Fassi en bajo redondearon un show bien ajustado, certero y atractivo en los riffs (chequear “La era gris” y “Y no al samurai”) y con un repertorio que durante dos horas nunca bajó la guardia sonora. Entre las letras se destaca la elocuente “Canción del Multiclub” que reza: “La vuelta al perro de 15 a 23, llega del Angel hasta el Suoem”. En el tramo final se sumaron invitados (que participan del disco) como Esteban Kabalin, “Titina” Bravín y Cristian Roldán de Ahoracos por el Rock. Gustavo Rodríguez en armónica había ingresado al inicio junto al malabarista Martín Olguín. En la previa se exhibieron imágenes de la banda en videoclip. J.R.S.
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