Poco más de 40 vecinos, la mitad socios y la otra mitad interesados en participar. Muchas sillas dispuestas en el salón parroquial y una hora de tolerancia antes de dar comienzo a la ansiada reunión.
Cuatro policías, la jueza de Paz, Laura Salgueiro; el padre Pepe; el médico del pueblo, Daniel Brusotti; el locutor y director de la Radio municipal, Julio Figueroa... Los integrantes del Consejo de Administración y los síndicos se ubicaron en la mesa cabecera junto a sus asesores letrados y contadores. Anunciaron y aguardaron 15 minutos para completar la hora. A las 17 en punto, el presidente Daniel Crossetto abrió el cónclave solicitando la designación de dos asambleístas que serían los encargados de rubricar el Acta de Asamblea: Oscar Rolando (inspector municipal, expolicía y bombero voluntario), y Eric Wertreer (expresidente de la Cooperativa) se ofrecieron y fueron aceptados.
De esta manera comenzó la Asamblea Extraordinaria convocada por el Consejo de Administración de la Cooperativa de Servicios Públicos de Pasco Limitada, a solicitud de los asociados para conocer sobre el faltante de 22.355 dólares que estaban depositados en una caja de seguridad de la sucursal Villa María del Banco de la Nación Argentina (BNA).
Informativa
Los consejeros y sus asesores intentaron dar respuestas a la incógnita que invadió a la comunidad desde el 5 de agosto. Los hechos fueron dados a conocer de manera oficial recién cuatro semanas después a partir de una nota que la Cooperativa remitió domicilio por domicilio de los socios de Pasco y a la que tuvo acceso inmediato EL DIARIO. Esa publicación fue una de las controversias, además del inexplicable faltante de los billetes de moneda norteamericana.
En la nota, la entidad de la economía social confirmó los hechos: 22.355 dólares que estaban en una caja de seguridad, desaparecieron.
El secretario de la Cooperativa leyó el segundo punto a tratar: el faltante de los dólares. El presidente del Consejo agradeció la presencia de los asistentes y manifestó que "esperaba más gente". De inmediato, un socio objetó el horario de la convocatoria por la disposición de quienes trabajan, lo que generó un pequeño cruce verbal, pero apenas el primero de la tarde. Los aplausos de los presentes dieron el apoyo al socio disidente.
Robert Bastino (tesorero de la Cooperativa) se encargó de repasar la manera en que surgió esta situación y que se dio a conocer luego que el Banco remitiera informes de registros. Marcó que "se sabía que no se iba, que no habíamos ido a chequear" la existencia de los billetes en la caja de seguridad del BNA, donde por última vez, según consta en la información suministrada en la nota que los cooperativistas difundieron en base a los datos aportados por la entidad bancaria, se accedió el 8 de enero de 2010.
Además, el tesorero admitió y narró: "No habíamos ido a registrarnos, yo en esa oportunidad no pude (el 5 de agosto), por lo que el presidente Daniel Crosetto y el secretario Fernando Sosa fueron a registrar sus firmas junto a la contadora Romina Manavella (sólo acompaña en estos casos), completaron todos los permisos... y se encontraron con eso. De inmediato realizaron la exposición policial y fueron a hablar con el gerente. Al otro día, enviamos nota para solicitar los informes y tuvimos una reunión de Consejo, por la gravedad del caso. No informamos en lo inmediato por no contar con elementos concretos".
Ese carácter informativo de la Asamblea fue rescatado toda vez que los cuestionamientos fueron subiendo de tono o ante las exigencias de definiciones.
La nota
A la hora de informar a la comunidad lo sucedido, los actuales consejeros indicaron que convocaron a quienes, basados siempre en los registros del BNA, aparecen como los últimos que accedieron a la caja de seguridad: Dardo Pereyra, Raúl Marín y José Suárez, presidente, tesorero y secretario de la Cooperativa, respectivamente, para darles a conocer a ellos en persona la situación y que informarían exponiendo sus nombres en una nota a los socios. Dejaron en claro en la asamblea, que Pereyra fue el único al que se le leyó la nota casi al mismo tiempo que se difundía, lo que desató una fuerte polémica con los otros dos, quienes consideran que se manchó su reputación. En ese aspecto, Suárez solicitó que la Cooperativa exprese públicamente para que "se limpie" su nombre.
En ese aspecto, el abogado villanovense Carlos Durán apareció en representación de un grupo de socios disidentes, integrado entre otros por los tres mencionados exconsejeros. Durán subrayó la redacción, en cuanto a cierta sospecha que dejaba sobre "los últimos" que accedieron a la caja de seguridad de donde faltaron los 22.355 dólares.
“Puntos oscuros”
La Asamblea mantuvo una tensa calma a pesar de que Bastino enumeró que "los puntos oscuros serían: los tres (Pereyra, Marín y Suárez) dejaron constancia en la planilla interna que existe en la caja, de que el dinero estaba allí". "El Consejo sigue investigando y analizando diversas líneas de acción. Mientras, debo dejar en claro que el Consejo en ningún momento dijo que lo que firmaron no es cierto: si dicen que la plata estaba, la plata estaba. Es la opinión de este Consejo", añadió.
Aunque los dichos del tesorero no cayeron del todo bien, calmó de manera temporal el encuentro.
Como segundo "punto oscuro", Bastino esgrimió: "Si la plata estaba el día que fueron (8 de enero de 2010) y no el 5 de agosto (de 2014), ¡alguien la sacó! ¿Contra quién accionamos? ¿Contra el Banco Nación?, si ya nos dice que no hay registros, no hay cámaras... Estamos viendo si vamos y de qué manera no se genera un perjuicio mayor a nuestra Cooperativa".
Una socia le sugirió "por qué no llamaron a un testigo del Banco para cubrir responsabilidades", pero Bastino rápido le contestó descartar apuntar a los consejeros y que en caso "de cargar contra alguien, lo hagamos frente a todas las comisiones de los cuatro años". Vale aclarar en este punto que el Consejo de Administración se renueva de manera parcial todos los años, renovando nueve cargos y permaneciendo sólo tres en cada oportunidad.
"Es buena esta participación, pero en la Asamblea para renovar autoridades somos muchos menos. En la última éramos 12", se quejó el tesorero.
Confesó que esperaban "encontrar más datos en los informes del banco, algún ingreso, conocer de un apoderado u otra persona autorizada para acceder a la caja... por eso demoró el informe. Pecamos de confiados, no estamos encubriendo. Si tuviéramos indicios de quién es el responsable, ya estaríamos tras él".
Más voces se sucedieron, planteado descubrir y pidiendo por saber. Intentando que las respuestas le aquietaran la incertidumbre, saciaran esa incógnita. Pero no alcanzó. Perduró la pregunta por dónde están los 22.355 dólares.
"Esta Asamblea es para corregir errores, tomar sugerencias y mejorar", redondeó Bastino ya en el final de la Asamblea, cuando el reloj marcaba las 18.13.
Fotografías: 1) La mesa de cabecera, con el Consejo de Administración y sus asesores
2) Bastino mostró copia de una planilla interna de la caja de seguridad
