El camarista Félix Martínez le impuso ayer una pena de seis años de prisión de cumplimiento efectivo a un jornalero que violó a una joven luego de amenazarla con un destornillador y golpearla en el interior de su automóvil.
Claudio Daniel Rivero fue declarado autor responsable de “abuso sexual con acceso carnal”, al cabo de un juicio oral que se realizó a puertas cerradas en la sala de audiencias de la Cámara del Crimen de Villa María.
Rivero, un rosarino de 29 años de edad (6 de junio de 1985), fue hallado culpable de haber violado a una joven de 25 en horas de la madrugada del pasado 2 de febrero, poco después de haber concurrido a una confitería bailable.
De acuerdo con la acusación, a la que el juez Martínez dio crédito al dictar el veredicto condenatorio, Rivero y la joven salieron del boliche “Ciro” y, acompañados por cuatro amigos, se dirigieron al domicilio particular del jornalero, sito en la esquina de Piedras y Ricardo Balbín, en barrio Las Quintas de Villa Nueva.
Allí los seis comieron y bebieron, hasta que en un momento Rivero salió en su vehículo particular en busca de cigarrillos. Y como la mujer también quería comprar, decidió acompañarlo.
Pero a no más de tres cuadras de la vivienda, en una zona descampada y oscura del citado barrio villanovense, el rosarino detuvo la marcha de su coche. Fue entonces cuando, empuñando un destornillador y bajo amenazas, obligó a la joven a desnudarse. Hubo algunos forcejeos y golpes, pero finalmente se impuso la fortaleza física del agresor, quien con la situación dominada abusó sexualmente de ella.
“Me zarpé”
De regreso al domicilio, la joven entró llorando a buscar sus pertenencias, situación que fue advertida por los cuatro amigos de Rivero. Sorprendidos, le preguntaron qué había pasado, a lo que el jornalero respondió: “Me zarpé”.
Poco después, la víctima se presentó en la Policía y denunció lo sucedido, con lo cual se inició una investigación judicial que derivó en la detención y el procesamiento del sospechoso como presunto autor de “abuso sexual con acceso carnal”, un delito que es reprimido con prisión de seis a 15 años.
Al ser indagado por el fiscal que instruyó la causa, Rivero negó haber violado a la joven y se defendió diciendo que la relación íntima había sido consentida y a cambio de una suma de dinero. Asimismo, señaló que la mujer lo había denunciado porque él se negó a pagarle por los “favores sexuales”.
No obstante, los testimonios prestados por sus amigos en sede judicial complicaron la situación del rosarino. Si bien ninguno presenció los hechos denunciados por la joven, sí la vieron llegar con las ropas prácticamente rasgadas, llorando y con una crisis de nervios. Y cuando interrogaron a Rivero sobre lo que había sucedido, les admitió que se había “zarpado”.
El debate oral
A poco de comenzado el juicio y tras la lectura de la pieza acusatoria, Rivero de abstuvo de declarar. Seguidamente compareció la víctima, quien relató los hechos denunciados por espacio de casi dos horas.
En esas circunstancias, el jornalero objetó sus dichos, lo que derivó en un careo entre ambos que se extendió por unos 30 minutos. Sin embargo, los dos se mantuvieron en sus dichos (ella aseguró que fue sometida por la fuerza y él que habían acordado mantener relaciones a cambio de dinero), por lo que no agregaron nada nuevo al debate.
A la hora de los alegatos, el fiscal de Cámara, Francisco Márquez, mantuvo la acusación y pidió una condena de siete años de prisión (uno por encima del mínimo previsto por la legislación), mientras que el abogado cordobés Carlos Hairabedián, quien ejerció la Defensa de Rivero, solicitó la absolución.
Claudio Rivero nació en la ciudad de Rosario, pero hace varios años se radicó en Villa Nueva, donde se casó y tuvo tres hijos, pero al cabo de un tiempo se separó.
Ayer, tanto su exesposa como su madre estuvieron presentes en la sala cuando se leyó el veredicto y ambas se mostraron conmovidas por el fallo condenatorio.
Las fotos
1) Claudio Rivero negó siempre haber violado a la joven y se defendió diciendo que la relación sexual había sido consentida y por dinero. Sin embargo, para la Justicia abusó de la mujer por la fuerza y bajo
amenazas
2) El mediático abogado cordobés Carlos Hairabedián ejerció la Defensa de Rivero. Aquí se lo ve conversando con el fiscal Francisco Márquez, poco antes de que se iniciara la audiencia