Con la presencia de casi la totalidad de sus delegados provinciales (de 60 participaron 59 representantes), el Colegio de Ingenieros Agrónomos de Córdoba (CIAPC), realizó su Asamblea General Ordinaria en la que se definió a un villamariense entre las principales autoridades.
Según pudo conocer este medio, el ingeniero agrónomo Raúl Montalvo del CIAPC Villa María (delegación K), seguirá como vicepresidente de la entidad, esta vez acompañando a Daniel Cavallín que cumplirá el rol de presidente.
Vale consignar que Montalvo llegó a la vicepresidencia en 2011, y en esta oportunidad accede al puesto a través de una lista de unidad que se consensuó en el seno de la institución que nuclea a los ingenieros agrónomos de toda la provincia.
“Los delegados hicimos un acuerdo de compromiso hacia adelante de trabajar todos por el consenso y la unidad”, expresaron a través de un comunicado los participantes de los comicios.
El trabajo de la nueva conducción que integra Montalvo comenzó fuertemente. Por lo pronto, ya se fijaron varias líneas de trabajo, entre las que se destaca el Proyecto Estratégico Institucional (PEI) expresado como documento que debe ser resultado del convencimiento de cada uno de los delegados. Desde el CIAPC plantean que el PEI debe ser participativo y ejecutable.
“El PEI es el rumbo que le marcamos al Colegio de acá a por lo menos seis años en adelante, por lo tanto es fundamental que sea consensuado y consultado entre todos. Ahí van a estar reflejadas todas las actividades que se vienen desarrollando y las que creemos nosotros que van a ser importantes en el futuro”, manifestó Daniel Cavallín, a lo que agregó: “Debemos ser un lugar de vanguardia dentro del sector agropecuario”.
Por otra parte, la expectativa de la nueva conducción es contundente: “Hay un compromiso de todos los delegados de participar. Los espacios son innumerables y hay muchos por ocupar. Necesitamos que se acerquen no sólo los delegados sino el resto de los colegas. Por un lado, para plantear cuáles son las necesidades. Por el otro, también para plantear soluciones.
“El Colegio es de todos y cada miembro debería poder aportar al crecimiento institucional. Las construcciones, si no son colectivas, lo son a corto plazo. Nuestro gran anhelo es que el Colegio sea el resultado del aporte de la totalidad de los ingenieros agrónomos”, concluyeron.
