Convertirse en centro de recepción permanente de basura electrónica es el último objetivo de un largo y abarcativo proyecto llamado “Punto electrónico” que los chicos de 5to. y 6to. grados de la Escuela 1º de Mayo llevan adelante este trimestre.

Luego de que los alumnos fueran invitados por la Municipalidad de Villa María a una charla sobre la temática, se plantearon una pregunta que disparó la investigación:  “¿Qué hacemos con la basura electrónica en Villa María?”. Dicho trabajo fue presentado en la instancia zonal de la Feria de Ciencias que se hizo en nuestra ciudad y salió seleccionado para la instancia provincial, de la que estarán participando 1, 2 y 3 de octubre en Córdoba capital.

Los alumnos de la docente Silvia Sigotto realizan actividades de todo tipo. “Adaptamos todos los contenidos curriculares que exige la provincia a esta temática, enfocándonos en la concientización a la comunidad para que separe la basura electrónica de los demás residuos”, explicó la maestra.

Los niños primero se informaron, conocieron y aprendieron sobre las ventajas de separar estos residuos y los daños que pueden provocar, lo que era el primer objetivo, para luego ir por el segundo, que era trasladar estos conocimientos a la comunidad.

“Los chicos hicieron folletos que salieron a repartir a vecinos y comercios del barrio para informar y dar a conocer que nosotros recibimos basura electrónica; hicieron maquetas sobre la temática y fuimos a la Tecnoteca para que ellos mismos graben cortos publicitarios que están saliendo al aire en este momento. Hicieron proyectos audiovisuales y participaron de muchas charlas”, enumeró Sigotto sobre lo que los niños vienen realizando hasta el momento.

Para la docente, esta actividad “significó una movida bastante importante porque salimos mucho, trabajamos mucho con la opinión de la gente, hicieron encuestas con las familias, los vecinos y se involucraron en el trabajo, ya que los chicos cuando ven basura de este tipo tirada en la calle golpean la puerta e indican los problemas que eso genera a la sociedad”.

Luego de una charla con el gerente de la empresa Progeas SA de la localidad de James Craik, les fue entregado un contenedor en el que colocan toda la basura electrónica que recepten para luego enviarla a la planta para su tratamiento.

“Con este proyecto quisimos hacerles ver a los chicos, que son los verdaderos protagonistas del trabajo, que ellos pueden generar cambios como cualquier otro alumno de otra escuela con más o menos recursos porque, antes que nada, son personas y tienen los mismos derechos que todos”, destacó la docente.

Los chicos llegaron a la conclusión de que los residuos electrónicos provocan daños y que hay falta de conocimiento al respecto en la sociedad villamariense, pese a la campaña anual que realiza el municipio.

Ahora, además de darse el lujo de participar en la Feria de Ciencias a nivel provincial, buscan dar a conocer que quieren convertirse en centro de recepción de basura electrónica y que continuarán haciéndolo más allá de la finalización del proyecto o ciclo lectivo.