Señores de EL DIARIO: 

Solicito la posibilidad de que publiquen esta carta. Soy nacido en Pasco, pasé mi juventud y, ya como adulto, estoy sorprendido por las cosas que están sucediendo en nuestra comunidad. Somos un pueblo pequeño, todos nos conocemos. Pueblo tranquilo que, por diversas cuestiones, ya dejó de serlo. 

Les paso a detallar algunas: sobre ruta provincial 6, viniendo desde La Laguna, a la entrada de nuestro pueblo hay o había una hilera de eucaliptus plantados por el exintendente Raúl Piccinini, 35 años atrás. En total son 65 árboles; fueron talados y arrancados de cuajo. Yo me pregunto quién autorizó este crimen contra el medio ambiente, más allá de que fueron muchos los árboles que se han plantado.

También, como es de público conocimiento, han ocurrido varios casos de robo, tanto de motos como a domicilios, animales... Me pregunto si será tiempo de que haya más vigilancia, más policías en Pasco. 

Hace más o menos 30 años teníamos un comisario más dos agentes que rondaban las 24 horas, con la diferencia de que hace tres décadas éramos menos de mil habitantes. Actualmente, gracias a una empresa cerealera, superamos los dos mil habitantes, más la zona rural y tenemos uno o dos agentes. Indudablemente, falta más seguridad. 

La gota que rebasó el vaso fue el faltante de dinero de una caja privada en un banco, plata que fue depositada por una comisión de la Cooperativa de Servicios Públicos de Pasco Lda., dinero que, según dicen, pertenece a sus accionistas (socios) que nada sabían de ese dinero depositado, dinero que tendría que haber ido a obras en beneficio de los mismos y estaba guardado, según dicen, hace años en una caja fuerte que nada ayudaba a la comunidad. Para qué queremos una cooperativa rica y socios que hacen malabares para comprar energía, pagar el cable o la ambulancia. Yo me pregunto qué significará la palabra cooperativa.

Una última reflexión, de un grande: “Nunca vi una mudanza detrás de una sepultura” (Papa Francisco, sobre acumular riquezas en la tierra: “Nunca vi un camión de mudanzas detrás de un cortejo funebre”). 

Espero que mis críticas sean constructivas, estamos en democracia y tengo derecho a realizar las mismas.

 

Jorge Risaletto

DNI 10.386.798