El Teatro Estable de Idiazábal
Señor director:
Lo que ocurre en los pueblitos del interior del interior no suele ser noticia que interese a nadie más que a los habitantes del mismo pueblo; pero allí ocurren cosas tan importantes como las que ocupan diariamente las páginas de los medios y normalmente son cosas positivas que no trascienden ni se difunden como merecen.
Porque estoy segura de que para ningún periodista de ese medio y tal vez de ningún otro, reviste suficiente interés la actividad cultural de un pueblito rural de poco más de mil almas, pero me parece que es bueno que se conozca más allá de sus reducidos límites, me permito dirigir a usted estas líneas con la intención y esperanza de que se las incluya en la sección “Los lectores también escriben” del diario.
En Idiazábal, unos 60 kilómetros al sur de Villa María, la Municipalidad, por el entusiasmo y decisión de su intendente Eliberto Favalli, su secretaria Edith Bizzarri y la responsable del área de Cultura, Ana María Olmos, promovió, creó y sostiene un grupo de “teatro-cultura” que se llama “Teatro Estable de Idiazábal”, en el que los habitantes del lugar (niños, jóvenes, adultos y adultos mayores) canalizan sus inquietudes por el hecho teatral.
La actividad transita su tercer año y el grupo se apresta a abrir su segunda temporada de espectáculos teatrales de su producción, el viernes 17, sábado 18 y domingo 19 de octubre próximos.
Un elenco que integran Cledy Martina, Gloria Terragno, Graciela Aguirre, Mariana Palacios, Nora Ulla, Valeria Aquistapace, Yolanda Aguirre, bajo la dirección del doctor Pilar Pedro Monesterolo, trabajo que ofrecerá una novedosa, singular y modernísima puesta de textos propios que son versión libre de la novela de Viviana Gómez Torphe, “No seré feliz, pero tengo marido”, abordando el género de la comedia con algunas características del stand up.
Le agradezco la atención que me preste, porque si como dijo García Lorca, “el teatro es el barómetro que marca la grandeza o el descenso de un pueblo”, es una buena noticia que en Idiazábal, como en muchas ciudades y en otros pequeños pueblos del interior, la gente comparta con el trabajo, el estudio, el deporte y toda su otra labor, esta actividad emotiva e intelectual del hombre que es el teatro-cultura, que, como dice Harold Pinter “es entusiasmo, pasión, compromiso y aventura”, que como bien lo subraya Eugenio Barba, “si bien no cambia al mundo, nos cambia a nosotros”.
María Jimena Balcaza
Agradecimiento
Señor director:
Quiero agradecer a través de este medio al personal del Sanatorio Cruz Azul, en especial al cuerpo médico por su altísimo nivel profesional, al cuerpo de enfermeras, verdaderas ángeles de la guarda, por su cordialidad y total entrega para con los enfermos, y a todos los integrantes de ese centro asistencial que ayudaron a recuperar mi salud, que estuvo severamente afectada.
Simplemente gracias, muchísimas gracias.
Fidencio José Faró
LE Nº 6.586.824