El municipio da cuenta de obras y desde las instituciones y la Casa de la Cultura surge un sinnúmero de propuestas que se extienden hasta el 22 y 23 de noviembre con las “24 horas, Las Perdices no duerme”

 

Hoy, a partir de las 8 se celebrará en el templo la oración de laudes, lo que marcará el inició de una jornada de honor y veneración para la Santa Protectora de la localidad, la Virgen del Rosario.

Para las 16.30 está programada la Misa en homenaje "a nuestra Madre", reza el anuncio litúrgico, que prevé una hora más tarde la Procesión con la imagen de la Patrona por las calles de Las Perdices.

Cada día, los actos religiosos tendrán a las 6.45, Rosario de Aurora; a las 17.45, Novenita de los Niños (sólo los días de semana); a las 21, Santo Rosario y desde las 21.30, la Santa Misa.

Desde el domingo 28 se viene celebrando la misa de novena en honor a la Virgen del Rosario, Patrona de la localidad. Cada noche tuvo una consigna diferente, dedicada a "el sentido de la vida del hombre. Encontrar al Señor para conocerlo y amarlo con alegría", donde oraron por los trabajadores rurales y urbanos.

Las demás noches fueron: “Luego de conocer al Señor estamos llamados a experimentar la dulce y confortadora alegría de evangelizar. Oramos por toda la Iglesia y su brazo fuerte, que es el laicado”.

“Dios llama al hombre a recorrer los caminos de la reconciliación y la solidaridad. Oramos por las autoridades e instituciones de nuestra comunidad”.

“Seguir a Jesucristo en medio de los grandes desafíos culturales. Oramos por los trabajadores del Reino de los Cielos, por quienes sirven a Dios en el trabajo parroquial”.

“Jesús nos llama, por intercesión de María, a vivir en comunión diciendo no a la guerra entre nosotros. Oramos por las vocaciones de la Iglesia”.

"Una Iglesia en salida y, en especial, al encuentro de quien sufre". Oramos por los enfermos y la tercera edad”. Se administrará el Sacramento de la Unción de los enfermos.

“Dios llama a nuestras familias a vivir los valores del Evangelio. Oramos por las familias y los matrimonios”.

"Somos llamados por Jesucristo a anunciar el Evangelio de la Vida". Bendición de las embarazadas. Consagración de los hijos vivos y difuntos por parte de las madres a la Virgen del Rosario (los fieles debieron asistir con una flor color rosa o blanca por cada hijo o difunto).

"Como María, estar atentos a las necesidades de los pobres". Día dedicado a la caridad (la consigna fue llevar alimentos para los hermanos necesitados y la misa fue a las 22.30).