El Ateneo La Posta de Villa Nueva se sumó ayer a los festejos por los 188 años de la ciudad reuniendo a adolescentes y adultos en torno al Monolito al Paso de Ferreira, donde se leyeron diversas poesías.
A media mañana comenzó el encuentro en el Parque Hipólito Yrigoyen. Asistieron estudiantes del CENMA Villa Nueva, Inmaculada Concepción y Escuela Bartolomé Mitre.
Carlota “Chiche” Molina de Moreno, Eva “Titi” Senn y Ana María Cabrera, de La Posta, contaron que cuando desde la Municipalidad las invitaron a sumarse a los eventos patronales consideraron que era bueno concretar la actividad en el monolito. “Siempre nos falta el salón, entonces nos planteamos recordar la fundación de la ciudad en el monolito”, dijo Carlota en el emblemático espacio.
Senn añadió que tras decidir el lugar concurrieron a algunas escuelas con el propósito de que los niños conozcan a los autores locales. “En algunos colegios nos costó y en otros hubo buena respuesta. No hemos llamado a todos porque se tornaría un acto extenso. Creo que hoy hemos sembrado la poesía de autoría villanovense”, subrayó.
En este sentido, remarcó que “hay muchísimos autores locales” y evaluó que “en algún momento tendríamos que celebrar los 50 años de literatura” de la ciudad.
En la ceremonia de ayer se rindió homenaje a través de la lectura y la creatividad al Paso de Ferreira, al río Ctalamochita, a la Virgen del Rosario, a la Glorieta y a la ciudad en general. “Todos le han escrito a Villa Nueva”, destacaron.
Así, los jóvenes se apropiaron de las letras plasmadas por Ricardo Kestli, Trinidad Galera, Geroma Prado, Roque Farías, Carlota Moreno y Titi Senn, entre otros.
“Lo que más rescato del acto es que pudimos interesar a las escuelas”, señaló “Chiche”.
Además, todos hablaron de lo referencial que es el punto de encuentro elegido en la víspera y rememoraron que en el cincuentenario de su creación, en 1994, hicieron un acto en el que contaron con la presencia de las tres personas que se encontraban con vida de las 51 que integraron la comisión que impulsó su instalación de ese monolito, el 28 de octubre de 1944.