Una pequeña y sencilla capilla que tiene como ornamentación principal la custodia con la eucaristía y como sustento el compromiso de 300 personas organizadas por turnos para estar rezando las 24 horas al día, los 365 días del año.
Esa actividad, que parecía difícil de organizar, cumple un año de vida y por eso la celebrarán hoy a partir de las 19 con lo que se conoce como “Hora Santa” y desde las 20, con una misa presidida por el obispo Samuel Jofré.
“Hace mucho que queríamos hacer una capilla de adoración permanente. Lo había pensado el padre Pedro Luchesse, pero no encontramos un lugar justo para hacerlo en la Catedral. Acá en el Cristo Rey, tenía ese pequeño espacio donde funcionaba la Secretaría de la parroquia y lo hicimos como capilla que, como pueden ver, está conectada al resto de la iglesia”, explicó el padre Pedro Fagoaga, sacerdote del lugar.
“Para los católicos es muy importante. Para nosotros, la adoración es la oración más preciada y acá tenemos a un pueblo adorando al santísimo en forma permanente”, dijo.
En el país hay 100 capillas similares, de las cuales tres están ubicadas en la provincia de Córdoba (además de la de Villa María está Marcos Juárez y Almafuerte).
La de esta ciudad se inauguró el mismo día de la beatificación del Cura Brochero y por eso lleva su nombre. Además de la custodia, el espacio tiene el crucifijo que habló a San Francisco en San Damián.
En el inicio, llegó a la ciudad un misionero mendocino para organizar la actividad. Una vez que contó con los voluntarios logró que con un compromiso de adoración de una hora por semana, se cubrieran todos los turnos. “Es difícil cubrir algunos horarios, como los de la madrugada o la de la hora de la comida de los fines de semana, pero igual se hace”, dijo el sacerdote, mientras mostraba a EL DIARIO un cuaderno en el que se registran los católicos que participan del sistema con los horarios cumplidos.
“Cuando empezamos con todo esto, yo pensé: si es una cosa mía, va a durar una semana; si es una cosa de Dios, perdurará. Y acá estamos, celebrando el primer año”, dijo Fagoaga, entusiasmado.
