¿Puede ayudarnos la incorporación del pescado y de las harinas integrales a nuestra dieta para prevenir problemas de memoria en el futuro? Al parecer sí.
Por esa razón, desde Fupron organizaron una charla libre y gratuita que tuvo muy buena respuesta de la gente, para hablar de los alimentos que ayudan a prevenir problemas de la memoria.
Los disertantes fueron el neurólogo Sergio Vesco, la nutricionista María Angeles Bailone y la cocinera profesional (también docente de la escuela Capacitar) Lucía Contrera.
“Uno de los pilares de la Fundación es la realización de actividades de promoción de salud, para que todos podamos ser agentes sanitarios”, explicó Vesco a EL DIARIO.
Sobre el tema puntual de la charla de la alimentación, explicó que “cada vez está más claro el rol preventivo que tiene la buena alimentación en todas las etapas de la vida” y destacó que en la actualidad, con el aumento de la población adulta, se “cambió el concepto que teníamos de lo que llamábamos anciano. Hoy, la persona mayor es una persona activa que demanda respuesta. Estamos empezando a prepararnos para esas exigencias. Creo que charlas como ésta ayudan a remarcar el derecho que tienen a recibir atención”, concluyó.
Recomendaciones
Bailone fue muy clara en su disertación explicando los alimentos que hay que sumar a la dieta para que las neuronas estén bien alimentadas y conectadas.
Uno de los elementos que hay que introducir es el conocido como Omega 3, que es lo que llamamos “grasas buenas”. Se encuentra en pescado de mar o de ríos de aguas frías y profundas. Caballas, jurel, salmón, atún o bacalao, son algunos de los ejemplos en los que se encuentra. “La proporción justa sería ingerirlos dos veces a la semana”, puntualizó la nutricionista.
También se encuentra en alta concentración en las nueces.
¡¡¡Pero ojo!!! Los aceites más habituales que consumimos, como el de girasol, compiten en el organismo con los Omega 3 y restan su efecto positivo.
También hay que incluir lecitina, que se encuentra en la soja y en la yema de huevo; fósforo, que se halla en las legumbres y las vitaminas B9 (naranjas) B12 (pescados y carnes) y B6 (frutos secos, cereales integrales, bananas).
También recomendó incluir los antioxidantes que se encuentran en varios alimentos como el perejil, el kiwy, la frutilla y el pimiento.
“En definitiva, lo ideal es una dieta mediterránea: frutas y verduras; frutos secos, pescados y carnes y algo de vino”, ejemplificó.
Un último concejo que dieron: hay estudios que demuestran que el queso camenbert tiene, además del calcio de todos los lácteos, un elemento que da efectos antinflamatorios.