Desde el 10 hasta el 26 de octubre se expuso en la planta baja del Museo Municipal Fernando Bonfiglioli una amplia exposición de acuarelas a cargo de seis amigas y artistas plásticas locales.
En la inauguración de la muestra, Haydée Coccioli, una de las expositoras, leyó una semblanza que aludía a valorar la compleja técnica empleada y la comunión de afectos que nucleaba al grupo.
“Desde los orígenes de la humanidad, el hombre ha tratado de expresar su percepción de la realidad. Testimonios de ello hallamos en las figuras rupestres de Altamira, en España, y también en las pictografías que se encuentran en el Cerro Colorado de nuestra provincia.
Nosotras, las que nos reunimos a pintar con acuarelas, tratamos de expresar nuestra percepción en la búsqueda de resaltar y brindar belleza. Pero sabemos que la belleza es intangible, es el bien supremo muy difícil de expresar porque aquí no lo podemos alcanzar. Sólo intentos que plasmamos con lápiz y color sobre el papel.
Pero tras cada intento, nuestra alma se reboza sólo un momento y la búsqueda continúa y buscamos otra forma y otro tema, uno tras otro porque ninguna obra logra nuestra plena aceptación.
Somos un grupo de compañeras que con este mismo anhelo nos unimos un día para tomar los pinceles y las acuarelas guiadas por una joven pintora: Laura Stagnaro, que vino a exponer aquí sus obras. Entusiasmadas, le pedimos que nos enseñara su técnica: húmedo sobre húmedo, e iniciamos esta nueva búsqueda. Pero Laura debía seguir su viaje. Quedamos solas y como ya se había consolidado nuestra aceptación mutua, decidimos continuar solas. Los elementos sustanciales ya los habíamos apropiado.
Y algunas con mayor comprensión y con su natural aptitud docente guió a quienes iniciaban su incursión en acuarelas y su logro es asombroso. Me refiero a nuestra compañera Estela Monfrinotti, quien se constituyó en nuestra guía. Aquí, en la muestra, pueden ver y apreciar la manifestación concreta de esta inclinación por el arte que nos une semana tras semana en casa de otra compañera: Norma Bomprezzi, quien generosamente nos brinda su espacio.
Muy agradecidas estamos de ellas y también de María del Carmen Pierantonelli, quien se ofreció en el primer momento. Amén de pinceladas, vivimos tardes apacibles y armoniosas, amenizadas con té, masitas, bizcochos, etcétera.
Permítanme adherir a la artistas plástica tan querida, Barbarina Crivello, quien en la poesía, el arte, el artista pinta nuestra circunstancia”. Completan el grupo Ana María Biasoni y Stella Perucca.