El camarista René Gandarillas le impuso ayer una condena de seis años y seis meses de prisión a Gustavo Javier Sabugo (40), el vecino tiopujiense que estaba siendo juzgado desde la semana pasada por hechos de abuso sexual en perjuicio de una niña, miembro indirecto de su entorno familiar.
Tras la lectura del veredicto, la madre de la víctima -que además es concubina de Sabugo- profirió insultos contra el fiscal Francisco Javier Márquez, aunque el incidente no pasó a mayores.
Previo al fallo, en la instancia conocida como “última palabra”, el acusado dijo que era inocente y negó de manera enfática haber sometido a la menor a tocamientos y manoseos impúdicos, que le valieron la imputación de “abuso sexual sin acceso carnal, gravemente ultrajante, agravado y reiterado”, delito por el cual fue finalmente condenado.
Sabugo está detenido desde julio de 2013 y en el caso de que la sentencia quede firme, estará en la cárcel hasta por lo menos noviembre de 2017, fecha en las que cumplirá las dos terceras partes de la condena (cuatro años y cuatro meses) y podrá solicitar la “libertad condicional”.
Sin embargo, eso no implica que se le conceda dicho beneficio excarcelatorio en forma automática y sin más trámite. Por el contrario, en la mayoría de los casos de abuso sexual la Justicia cordobesa es mucho más estricta y rigurosa al momento de evaluar si el condenado está en condiciones de reinsertarse socialmente, más allá de que haya observado buena conducta durante todo el período de detención y apruebe una pericia psicológica.
En definitiva, no es un hecho que Sabugo vaya a ser liberado cuando cumpla los dos tercios de la pena impuesta en la víspera. Puede ocurrir, incluso, que tenga que completar los seis años y medio de prisión.
Cabe recordar que el lunes, durante los alegatos, el fiscal Márquez había pedido una pena de ocho años de prisión, mientras que el abogado defensor, Juan Antonio Rusconi, solicitó la absolución de su cliente.
Conforme a una reciente jurisprudencia del Tribunal Superior de Justicia de la Provincia, la escala penal del delito por el cual fue condenado Sabugo va de los cinco años y seis meses a los 15 años de prisión. De modo que la sanción aplicada por el juez Gandarillas está un año por encima del mínimo que prevé la legislación.
Los hechos por los que el tiopujiense fue declarado culpable se produjeron en fechas no precisadas con exactitud, pero registradas durante el transcurso del año 2012, en la vecina localidad.
Gustavo Sabugo nació el 21 de octubre de 1974 (cumplió 40 años el mismo día que comenzaba este juicio) y registra último domicilio en Eva Duarte 226, en Tío Pujio. Al momento de ser detenido realizaba tareas de desmalezamiento con motoguadaña y cavado de bases para postes de luz, todo eso para la Cooperativa de Energía Eléctrica y Agua de dicha población.