Seis testigos comparecieron ayer en la segunda audiencia del juicio oral y público que se les sigue a Abel Sebastián Coz (28) y Leonardo Marchisio (20) acusados de asaltar una estación de servicios de La Playosa y de cometer otros delitos contra la propiedad en la ciudad de Las Varillas, donde están radicados.
Para hoy, en tanto, está previsto receptar un último testimonio (en este caso, vinculado a otro de los episodios delictivos que son investigados) y luego habrá un cuarto intermedio hasta el lunes, jornada en la que se escucharán los alegatos y posteriormente se dictará sentencia.
Los seis testigos que declararon en la víspera lo hicieron en relación al más grave de los hechos que se les atribuyen a Coz y a Marchisio (en rigor de verdad, el único que los tiene como coimputados), por un asalto a mano armada perpetrado poco después de las 21.30 del sábado 2 de marzo de 2013 en la estación de servicios YPF “Estilo”, propiedad de Carlos Ernesto Marcus, ubicada en bulevar Alberdi 103, en la vecina localidad.
Testigo clave
Y de todos los testimonios, quizás el más relevante fue el de la joven playosense Noelia Foos, empleada de la expendedora de combustibles, quien fue víctima directa del accionar de los dos ladrones, quienes bajo amenazas de muerte la desapoderaron de 450 pesos que tenía en la billetera del negocio.
Cabe señalar que los sujetos que asaltaron la YPF llegaron a bordo de una motocicleta Honda CG Titán y, con las cabezas cubiertas para no ser identificados (uno llevaba un casco negro con una raya blanca), le sustrajeron la recaudación a la playera luego de intimidarla con un revólver.
Si bien Foos no pudo ver los rostros de los delincuentes, aportó como datos distintivos el color y las características del casco que llevaba puesto uno de ellos, y que momentos más tarde fue secuestrado en poder de Coz, como así también la Honda Titán.
La detención
Luego del robo, los asaltantes escaparon raudamente por la ruta nacional 158 con rumbo a Pozo del Molle. Sin embargo, cuando arribaron el pueblo, la Policía -anoticiada del atraco- había montado un operativo de control vehicular en la salida hacia Las Varillas.
Cuando los maleantes vieron a los uniformados, giraron a la izquierda por una calle de tierra que conduce a un campo, donde luego de recorrer unos metros se empantanaron en un charco de agua y barro que se había generado por una reciente lluvia.
Imposibilitados de continuar juntos, los sujetos optaron por separarse: uno se llevó la moto a tiro y el otro caminó hasta cerca de la ruta, donde le hizo “dedo” a Daniel Alejandro Tesio, un vecino mollense que circunstancialmente pasaba por allí en su moto.
Instantes después la Policía interceptó el rodado en que se conducían Tesio y Marchisio, creyendo que se trataba de los ladrones de la YPF, pero luego se estableció que el dueño de la moto no tenía nada que ver con el hecho y que había accedido a llevar al joven varillense.
Casi simultáneamente, otros efectivos lograron aprehender a Coz y le secuestraron el casco y la Honda Titán que usaron los ladrones en la estación de servicios.
Tesio fue el segundo testigo que declaró en la audiencia de la víspera y lo hizo para relatar detalles del episodio en el que accedió a llevar a Marchisio en su moto, lo que generó que aquella noche fuera inicialmente demorado.
También comparecieron ayer cuatro efectivos policiales (de apellidos Chialvo, Fiori, Pereyra y Ludueña), quienes intervinieron en los procedimientos de detención de los sospechosos, y declararon en relación a la actividad funcional que les cupo a cada uno.
Juez y partes
Cabe recordar que el juicio es presidido por el camarista René Gandarillas y cuenta con la participación del fiscal Francisco Márquez y de los abogados villamarienses Eduardo Rigalt y Daniel Volpe, quienes ejercen las defensas de Coz y Marchisio, respectivamente, mientras que la secretaria actuante es Gabriela Sanz.
Las fotografías
1) La joven playosense Noelia Foos reconoció el casco que llevaba puesto uno de los asaltantes
2) El fiscal Márquez interroga al testigo Daniel Tesio, quien la noche del asalto accedió a llevar a Marchisio en su moto, luego que éste le hiciera “dedo” en Pozo del Molle