Alrededor de un centenar de personas, entre los que se encontraban familiares y amigos de Francisco Javier Mignola, marcharon anoche por las calles que circundan la plaza Centenario para reclamar que se esclarezca la dudosa muerte del joven villamariense, acaecida hace dos fines de semana luego de asistir a una fiesta electrónica en una estancia ubicada cerca de La Falda.
Llevando una pancarta de tres metros de ancho con la inscripción “justicia por Pancho” y pequeños carteles con la imagen del muchacho de 19 años, fallecido poco después del mediodía el domingo 26 de octubre, los allegados a la familia Mignola se concentraron en la esquina de Buenos Aires y General Paz.
Allí, la mamá de Francisco, Noemí Bongiovanni, conversó con los medios de prensa sobre el estado actual de la causa y poco después encabezó la marcha que giró alrededor de la plaza en sentido contrario a la dirección de las calles. Junto a ella estuvieron el papá de Pancho, Javier Mignola, y su hermana mayor, de 23 años, a los que se sumaron otros familiares y amigos.
Detrás se encolumnaron allegados a la familia, muchos de los cuales portaron velas en improvisados candelabros de plástico.
Todos, sin excepción, marcharon en el más profundo de los silencios, mientras algunos efectivos policiales ordenaron el tránsito vehicular y hasta cortaron el acceso de los automóviles para que la columna transitara las calles con tranquilidad.
Con los medios
En su contacto con la prensa local, Noemí Bongiovanni señaló que, “a través de mucha gente que está colaborando con nosotros, conseguimos las fotos en las cuales se promocionaba la fiesta de dos días: día 1, el sábado, que era privada, y día 2, el domingo, que era abierta al público y en la que se cobraba 100 pesos la entrada”.
En otro pasaje de sus declaraciones, la madre de Francisco sostuvo que “la dueña del lugar donde se hizo la fiesta (la estancia El Silencio, ubicada a 15 kilómetros de La Falda, en las Sierras Chicas) sabía lo que estaba pasando, obviamente porque se trataba de una fiesta de semejante magnitud, en la que pasaron alrededor de 1.500 personas”.
Bongiovanni sostuvo que “en el momento que mi hijo estaba convulsionando, había alrededor de 600 chicos y eso no era precisamente un cumpleaños, como se dijo por ahí”.
La atribulada mujer, aunque serena en las palabras, admitió que su hijo “fue por propia voluntad al lugar, no fue llevado a la fuerza”, y seguidamente dijo que Francisco “estaba saliendo de sus adicciones y supongo que a todos los que asistieron a la fiesta les suministraron drogas”.
Fue sobredosis
“Mi hijo murió de sobredosis”, afirmó Noemí, aunque también sostuvo que hay “una infinidad de versiones que, con las declaraciones de los chicos, se irán aclarando”. Sobre el particular, dijo haber escuchado que su hijo “estaba convulsionando y para que se calmara le daban más droga”.
“Hay que esperar que la Justicia dictamine qué es lo que ha pasado en realidad. Yo lo que quiero es que se sepa cómo son estos eventos, donde no había habilitación, no había policías, no había bomberos, no había servicio de emergencia y no había señal de teléfono”, añadió Bongiovanni.
También estuvo presente en la marcha el abogado villamariense José Luis Bertoldi, quien desde hace muchos años es socio, en el estudio que posee en la capital provincial, del reconocido penalista cordobés Miguel Ortiz Pellegrini, quien desde la semana pasada patrocina a la familia Mignola en esta causa.
En diálogo con los periodistas, Bertoldi precisó que Bongiovanni declaró ayer por espacio de unas dos horas en la División Homicidios de la Jefatura Central de Policía y que lo hizo acompañada por el padre de Francisco.
“Todavía no tenemos ninguna información de la autopsia. Creo que esto va a demorar un poco, sobre todo el análisis químico que hagan de los órganos y las vísceras de la víctima”, añadió el letrado, quien asiste técnicamente a la familia.
Cuando se le preguntó sobre los posibles testigos del episodio que terminó con la vida del joven villamariense Bertoldi señaló: “Yo espero que todos los chicos que estaban en ese lugar, y que afortunadamente tienen la suerte de estar vivos, digan la verdad de todo lo que vieron, de todo lo que oyeron o de todo lo que les dijeron. Espero que ninguno de ellos se retraiga al momento de prestar declaración en la Justicia”.
Dijeron presente
Finalmente, cabe señalar que entre los presentes a la concentración en la plaza y la posterior marcha por las calles del centro estuvieron el concejal radical Carlos Gagliano y el exdirigente gremial de los judiciales Roberto Battaglia.
Fotografías: 1) Luego de hablar con los medios de prensa, los familiares de Francisco Mignola marcharon alrededor de la plaza, en sentido contrario a las calles. Los acompañaron unas 100 personas
2) Los padres de Francisco estuvieron acompañados por familiares, amigos y allegados, de los que recibieron innumerables muestras de afecto y contención durante la marcha de anoche
