Mañana a las 20 habrá una charla sobre "Difusores de insulina para pacientes diabéticos", en la Clínica de la Familia, ubicada en Larrabure al 1400.
Será de carácter gratuito y se desarrollará en el salón de la planta alta, con la disertación de la nutricionista Mercedes Uribarri y el auspicio de Laboratorios Roche.
El evento es coordinado por el médico Ariel Segura, a cargo del Area de Diabetes del nosocomio.
Sobre este tipo de artefactos, la Sociedad Argentina de Diabetes ha señalado que "en los últimos tiempos se ha comenzado a escuchar y popularizar el tratamiento con infusores de insulina (llamadas comúnmente “bombas de insulina”) para los pacientes diabéticos, con el cual se puede estabilizar la glucemia, dejar de aplicarse la insulina con las agujas y poder predecir el valor de glucosa que habrá luego de cada comida, lo cual no es poco en un tratamiento de por vida, y en una enfermedad con la que hay que convivir.
Pero antes de hablar de las bondades hay que responder algunas preguntas para conocer algunos aspectos del tratamiento e identificar qué pacientes son candidatos para este.
¿Qué es una bomba de insulina ? Es un dispositivo del tamaño de un celular que permite administrar la insulina de manera continua. La “bomba” tiene en su interior un compartimento destinado a colocar el depósito de insulina, que se rellena de la misma forma que una jeringa convencional. La insulina se administra de forma continua, por tanto es necesario tener una conexión permanente a través de un tubo llamado catéter que se coloca en el tejido subcutáneo y se debe cambiar cada dos o tres días. Este catéter tiene en su extremo una aguja (que luego se retira) que nos permite colocarlo en la piel y de esta manera la insulina se va absorbiendo progresivamente en el tejido celular subcutáneo y de allí a la sangre venosa.
¿Cómo funciona?
En el individuo sin diabetes, el páncreas segrega de forma continua una pequeña cantidad de insulina que permite mantener la glucosa en sangre normal. Además, después de una comida se produce un aumento importante de glucosa en sangre, a lo que el páncreas responde segregando insulina de manera adicional. El infusor tiene el mismo fundamento, el equipo médico programará el dispositivo de tal manera que libere en forma continua una cantidad establecida de insulina y el paciente agregara dosis adicionales de insulina antes de las comidas según el valor de glucosa capilar que tenga y según lo que desee comer. El paciente podrá ir modificando la cantidad de insulina para poder adaptarlas a las diferentes situaciones de la vida (actividad física, fiestas, momentos de estrés, etcétera).
Entonces, ¿todas las personas que usan insulina pueden colocarse la bomba ?
No es para todos los pacientes, sino sólo para algunos con diabetes tipo 1 o insulinodependiente que habitualmente se aplican varias veces la Insulina al día.
La Sociedad Argentina de Diabetes ha consensuado indicaciones absolutas y relativas para el uso del infusor, pero idealmente todo paciente infantojuvenil (pacientes diabetes tipo 1 o insulinodependiente) es un candidato para el uso del mismo, sobre todo aquellos pacientes que a pesar de usar múltiples dosis de insulina no logran estar estables con sus glucemias o su hemoglobina glicosilada (que mide un promedio de las glucosas de los últimos tres meses) o que presente formas de difícil tratamiento de la diabetes conocida como “lábil” o que tenga complicaciones asociadas a la diabetes de larga evolución. En general no es un tratamiento para pacientes adultos con diabetes tipo 2 que usan medicación oral o inyecciones de insulina combinadas con medicación, ya que en estos el páncreas mantiene hasta estadios finales una secreción remanente de insulina y no necesita múltiples dosis de esta.
¿Las personas que tienen la bomba de insulina pueden dejar de medirse la glucosa todos los días ?
No, por el contrario; deben medirse varias veces al día ( al menos cuatro) para poder indicarle a la bomba qué dosis de insulina necesitan, sobre todo antes de cada comida.
¿La bomba decide la cantidad de insulina a colocar según los valores de glucemia?
No, aún no están desarrollados los infusores basados en la idea del páncreas artificial, por lo que aun con el infusor es necesario monitorizar la glucosa para realizar los bolos prandiales y/o bolos de corrección y tampoco el infusor administra la insulina en función de la glucosa en sangre, la programación la realiza el equipo médico en conjunto con el paciente. A pesar de esto, los últimos modelos de diferentes compañías tienen dispositivos avanzados con calculadoras de bolos, lo que permite rápidamente conocer la cantidad de insulina a administrar antes de las comidas. Pero, finalmente, es el paciente el que se aplica el bolo con la cantidad elegida.
¿Qué es una bomba con sensor?
Para pacientes seleccionados con alta propensión a las hipoglucemias severas, se han diseñado sensores de glucosa que permiten detener la infusión de insulina frente estos casos, evitando las situaciones graves.
Beneficios del uso de la bomba e insulina:
· Menos pinchazos.
· Posibilidad de mejor ajuste de las dosis de insulina.
· Si el paciente la usa correctamente, mejor control de la glucosa con mejor control metabólico.
· Mejor calidad de vida.
Desventajas
· El paciente debe aprender a manejar el aparato tecnológico, programar las dosis , cambiar los catéteres, etcétera. Si bien no es muy complicado, se requiere de ciertas destrezas.
· La bomba debe utilizarse todo el tiempo (las 24 horas del día y los siete días de la semana). Ante cualquier imprevisto, el paciente puede permanecer sin ella sólo por un tiempo máximo de dos horas
· La bomba puede apreciarse a simple vista, sobre todo cuando se usa traje de baño. Esto pude resultar incomodo para algunos pacientes, sobre todo para los adolescentes
· Requiere de un monitoreo de glucosa continuo.
· Requiere cambio del catéter cada tres días para evitar infecciones.
· Alto costo.
¿El uso de la bomba puede ser riesgoso?
Al utilizar la bomba de insulina se deben tener cuidados especiales y si esta no es utilizada adecuadamente, puede ocasionar serios problemas que podrían ser riesgosos. Si la bomba deja de funcionar o el set de infusión se tapa, los niveles de glucemia pueden ir aumentando rápidamente, por lo que es muy importante que se tomen siempre las previsiones necesarias y se aseguren que la bomba está funcionando correctamente y tenga suficiente batería.
Seguramente con el tiempo la ciencia permitirá acercarnos al infusor ideal, pero por lo pronto existen excelentes alternativas con equipos de profesionales dedicados a enseñar y acompañar todo este proceso.
En conclusión, la Sociedad Argentina de Diabetes capítulo Córdoba quiere compartir con los pacientes diabéticos esta información:
Los infusores o “bombas” de insulinas son un excelente tratamiento para pacientes seleccionados, en su mayoría diabéticos tipo 1 (insulinodependientes) infantojuveniles o con diabetes lábil, necesitando los pacientes un entrenamiento y un seguimiento especial por un equipo médico especializado.
Por consultas sobre el tema pueden comunicarse con el sitio web de la sociedad www.sadcordoba.com o www.diabetes.org.ar.