uego de un flojo primer tiempo, Ameghino se despertó de una “siesta prolongada” y terminó ganando con autoridad el segundo partido de la serie final, por 82 a 52, y de esa manera se consagró campeón del Torneo Asociativo Segunda Ronda, de la Asociación de Básquetbol de Villa María.

Los de calle San Juan habían ganado un mes atrás, durante el primer partido jugado en su cancha, por 106 a 59, y de esta manera, con el triunfo de anoche definieron la serie al mejor de tres juegos, para quedarse con el campeonato en forma invicta, igual que lo sucedido en el Apertura.

Pero para ganar el partido, primero tuvieron que saber sufrir, como dice el tango; Unión Central fue más que Ameghino. Si bien el partido fue deslucido en el primer cuarto, donde predominaron las faltas y las imprecisiones, en ambos equipos, fue el dueño de casa el que se mostró efectivo en defensa y ataque, que le permitió predominar en el primer segmento por 19 a 12.

En el segundo acto, Ameghino se llevó el parcial, pero en el global siguió predominando el “Aurinegro”, que se fue al descanso con ventaja mínima de 30 a 29, donde sobresalieron Cichy (que prácticamente anuló a Cerutti y además aportó 9 puntos, entre ellos dos triples), Fernández también con 9 puntos (todos de tiro libre) y Pérez (con 8 tantos).

En Ameghino, los mejores de esa primera parte fueron Iglesias con 9, y Aristimuño con 7 puntos, aunque a nivel colectivo fue una sombra de la primera final, donde tuvo más errores, que aciertos. 

Luego del entretiempo se vio otro partido. Ameghino se mostró implacable en los primeros minutos del tercer cuarto, ahora con un Aristimuño intratable, que en menos de 6 minutos sumó 9 puntos (terminó siendo el goleador del partido con 20 tantos), bien acompañado por Cordero y por Iglesias (autor de 2 triples). Unión se fue desdibujando, no tuvo el mismo traslado de pelota que en la primera mitad y en defensa comenzó a mostrar fallas.

El parcial conseguido en ese tercer segmento por Ameghino, dejó en claro que su siesta había terminado y que no perdonó los errores del local, para pasar a ganar por 62 a 45, al final de ese parcial.

Ameghino, en el último cuarto, siguió mostrando consistencia en defensa y efectividad en las salidas rápidas. El mayor recambio en su plantilla jugó a su favor, mientras que Unión, con un banco con mucha juventud, no pudo sumar con el recambio.

La última parte los tuvo a ambos jugando con mayoría de jugadores juveniles donde emergió la figura de Andrés Renzi. Vaya paradoja, el mismo jugador que había sido epicentro de la desgastante y estéril disputa de escritorio (por la protesta de Unión por la supuesta mala inclusión en el primer partido). Fue Renzi quien se convirtió en la pieza más importante del campeón en el último tramo del juego.

Ameghino apareció con todo en el segundo tiempo y terminó ganando con otra actitud y eficacia, logrando una diferencia más ajustada a la realidad de ambos planteles.

Los de calle San Juan se llevaron un nuevo campeonato y, ahora sí, enfocarán todas sus ilusiones en el debut del próximo viernes, en la Liga Cordobesa.