Señor director:
El lunes 10 de noviembre es internado, alrededor de las 20, mi cuñado, Carlos Héctor Leyes (de 57 años, con síndrome de Down) en la Clínica Marañón presentando un cuadro severo, el cual requería terapia intensiva.
En dicho nosocomio no había disponibilidad de camas, lo que hace que se comuniquen con el número 801-777-2985, de Emergencias Médicas de la Administración Provincial de Seguro de Salud (Apross) solicitando lugar en alguna Unidad de Terapia Intensiva (UTI) de Villa María. Y le dicen que ellos se van a ocupar.
Pasadas las 21.15 y sin obtener respuesta alguna, me comunico personalmente al mismo número y soy atendido por Pablo (inútil, inepto e inoperante), ante quien lamentablemente se me sale la cadena y le exijo que en menos de 30 minutos debe conseguir una cama, a lo que había aducido que en las clínicas de Villa María no era posible internarlo en terapia por no haber disponibilidad.
A los 25 minutos se comunica con la Clínica Marañón y le dice que había conseguido cama en Alta Gracia, pero que la ambulancia para trasladarlo se encontraba en Río Tercero.
Luego de esto me comunico con un amigo: Enrique Barraud (secretario general del Sindicato de Camioneros de la Provincia de Córdoba), quien textualmente me dice “traelo a la clínica”, en referencia a la Clínica de la Familia III del Sindicato de Camioneros en esta ciudad de Villa María.
Por favor, señores, ¡qué clínica!... Orgullo debemos sentir los villamarienses de tener una clínica de semejante calibre en la ciudad y, más aún, si alguien resuelve expeditivamente sin tanta burocracia y protocolo.
Gracias a Dios, a partir de ahí mi cuñado quedó internado en una sala de terapia intensiva y con una atención bárbara.
Con el correr de los minutos, estando en la Clínica de la Familia III, me entero de que jamás habían recibido una comunicación telefónica desde el Apross solicitando un lugar en la Unidad de Terapia Intensiva.
Lógicamente, me llené de preguntas: ¿sirve Apross?, ¿paga a los prestadores?, ¿tiene gente competente?, ¿es tan buena como para descontar de los sueldos y no fallar?...
Señor gobernador de la provincia de Córdoba, doctor José Manuel de la Sota, para nada es una crítica a su gestión, pero por favor, que su ministro de Salud tome cartas en el asunto.
Gracias, Enrique, gracias Noelia, gracias Clínica de la Familia III. Dios los bendiga.
Jorge Deulofeu
“Sandunga”
DNI 12.489.297