Cuantiosos daños provocaron los ladrones que, durante la siesta de ayer, accedieron por un pasillo y destrozaron la ventana de una vivienda, a la que ingresaron y causaron gran desorden en el interior de dos habitaciones con fines de robo.

El hecho delictivo fue perpetrado en Catamarca 225, a no más de 80 metros de los monoblocks, en barrio Güemes, entre las 13 y las 16 de la víspera, cuando la propietaria del lugar, María Elena Tumas, viuda de Kestli, se ausentó para compartir el almuerzo con familiares.

El accionar de los ladrones fue detectado, en primer lugar, por la dueña de la casa al retornar a las 16, y debido al desorden provocado por los delincuentes aún no había podido determinar si le habían robado.

Los cacos arrancaron la reja de una ventana, levantaron la persiana y rompieron el vidrio (foto) para ganar el interior de la vivienda.

Al lado, denunció la damnificada a la Policía, hay una casa que hace 15 años que está abandonada y se ha constituido en un reducto propicio para las maniobras de los dueños de lo ajeno.