El concejal del Frente Cívico Jorge Heredia se erigió en el voto indispensable del oficialismo y con su visto bueno se aprobó ayer el Presupuesto General de Gastos y Recursos y la Tarifaria para el año próximo.
El Frente para la Victoria necesitaba sí o sí de un voto de la oposición, porque uno de sus cuatro ediles (la delasotista Nora Pérez) rechazó ambos proyectos. Con el radicalismo encendido y absolutamente en contra, el único camino posible era el respaldo del Frente Cívico, algo que tal como se suponía (y en consonancia con la nota de EL DIARIO de ayer) se concretó.
Lo curioso fue el silencio de Heredia durante toda la sesión, que fue extensa. No abrió la boca en ningún momento y su postura se conoció por un despacho que firmó con los ediles oficialistas Natalio Graglia, Graciela Isaguirre y Nuri Vélez.
El concejal del Frente Cívico atraviesa una etapa incómoda ya que el líder de su partido, Manuel Argüello, se había pronunciado públicamente en desacuerdo con los dos proyectos.
Más allá de esta cuestión partidaria, lo concreto es que el intendente Guillermo Cavagnero consiguió en la víspera (por cuatro votos contra tres) las herramientas claves para su último año de gestión. Manejará un presupuesto de 177 millones de pesos y podrá incrementar las tasas que inciden en inmuebles y en el comercio e industria en un 35% aproximadamente.
El peronismo
Junto a Heredia, los tres concejales alineados al kirchnerismo resaltaron por escrito la implementación de un presupuesto por programas, que permite un mejor ordenamiento y administración por áreas.
Por su lado, la edil de Unión por Córdoba, Nora Pérez (de la misma bancada que tres últimos) sostuvo que los incrementos en tasas “no se condicen con las previsiones inflacionarias” tanto del INDEC como de consultoras privadas y apuntó que “en muchos sectores” los servicios no llegan a prestarse adecuadamente. También recalcó que en la Audiencia Pública los vecinos habían solicitado que la suba sea acorde al costo de vida, “pero pareciera ser que sus pedidos no ha tenido eco”.
En cuanto al Presupuesto, la legisladora subrayó que vuelven a reiterarse partidas año tras año, por obras “que siguen sin ejecución”. Hizo hincapié en la demora de las primeras 50 de 200 viviendas prometidas y en las dilataciones en la ejecución de desagües. “Villa Nueva pareciera ser sólo obra pública dejando en segundo o tercer o cuarto lugar a la salud, la educación, el desarrollo social”, dijo en otro tramo de su exposición precisando que esas áreas no manejarán más de 3 millones de pesos cada una.
Y remarcó que “un gobierno verdaderamente progresista necesita de más salud, educación y acción social”.
Nora Pérez rechazó el proyecto en lo general pero aprobó la partida para sueldos de trabajadores y las de las áreas sensibles.
s El radicalismo
En tanto, el bloque radical, conformado por Nora Bizzutti y Javier Pérez, destacó que en el país hay una crisis indiscutible y que la Unión Industrial de Córdoba le pidió al gobernador José de la Sota rever los incrementos de impuestos. “En Villa Nueva, sumando todos los aumentos que tuvo la tasa en los últimos tiempos, se llega a un porcentaje del 600%”, dijo Bizzutti.
Agregó que nadie explicó en el recinto por qué saltó del 10% al 20% lo que percibe EPEC de los villanovenses y recalcó que con las subas tarifarias de los últimos años no se logró “dejar las calles como corresponde y brindar el riego, mientras que el alumbrado está en algunas partes y en otras no”.
En tanto, Javier Pérez advirtió: “Sólo se recauda un 48%, pese al convenio con el Profam que se llevó 10 millones de pesos, es decir lo equivalente a un presupuesto y medio de Salud, o cinco presupuestos de Acción Social, una bandera que ustedes ejercen”.