Héctor Arzubialde se fue con “bronca” porque no se consiguió los objetivos de clasificar, tanto en el Federal B como en la Copa Argentina. ¿El futuro?, una incertidumbre, pero por lo pronto aclaró: “No descarto nada, si me quedo en Alumni será para armar todo y buscar quizás con otros aires e ímpetu los objetivos”
Con un gusto amargo se dio el final de la tercera etapa de Héctor Arzubialde de Alumni que, por estas horas, se desconoce cuál será su futuro dentro de un club que tampoco dirigencialmente tiene claro qué norte va a seguir por estas horas.
Por lo pronto, aunque deportivamente no se dieron los resultados queridos en los certámenes nacionales, la institución está con los sueldos al día y, en las competiciones locales, es notable protagonista.
Igualmente, con la eliminación del jueves de la Copa Argentina frente a La Emilia de San Nicolás, se cerró el vínculo con el entrenador del plantel principal, al igual que el mandato de la comisión que preside Sergio Hidalgo, quien meses atrás apuntó que se retiraba una vez cumplido este ciclo.
No obstante, todavía queda tela para recorrer en la temporada en el ámbito local y, en cuanto al futuro, en los próximos días habría mayores certezas porque las incógnitas, principalmente, surgen por el extenso tiempo de receso de un certamen a otro en el ámbito nacional.
Dicha realidad general y personal describió el entrenador Héctor Arzubialde tras caer frente a La Emilia de San Nicolás el último jueves cuando se le preguntó sobre su futuro. Por lo pronto, dejó la puerta abierta para seguir, pero con condiciones que dependerán de la idea que tengan los directivos.
En primer término, en tanto, el técnico explicó las razones de la derrota: “Realmente jugamos 40 minutos muy malos en el primer tiempo; en el arranque del partido casi convertimos en la primera jugada, pero cuando nos hacen el primero gol fue un golpe de lo anímico y empezamos a tener errores individuales y colectivos”.
Y, enseguida, comentó: “Me duele terminar con esta imagen porque no es nuestra imagen. Nos pueden eliminar, pero no como lo hicimos en el primer tiempo, donde estuvimos muy quietos. Son situaciones que a veces pasan, todos queríamos despedirnos ganando, pero lamentablemente no ha podido ser así y de aquí en más habrá que hacer un análisis más exhaustivo con mayor tranquilidad y un balance general para saber qué más podríamos haber hecho”.
Incertidumbre
“Al futuro no lo sabemos. Hablé con Sergio Hidalgo, quien también tendrá que definir qué va a pasar con él porque hoy (por el jueves) también está cumpliendo su mandato. No sé cuál será su idea de aquí en más”, apuntó en otro momento del diálogo con los medios el entrenador, quien además agregó “agradezco (a Hidalgo) la confianza que ha tenido hacia nosotros, pero el futuro no es muy cercano, porque para un nuevo inicio faltan más de tres meses que serán largos y duros”.
“Así que habrá que sentarse a charlar ellos (los directivos) primeros para ver cómo se organizan institucionalmente y después veremos el futuro nuestro”, consideró.
“Los jugadores también tendrán la incertidumbre de saber qué va a pasar con ellos. Esto es así cuando se termina una etapa. Hoy (por el jueves) se finalizó una nueva etapa y no la hemos terminado como queríamos. Esa es la realidad”, subrayó.
“Está claro que cuando vine fue para tratar de buscar algunas soluciones a ese momento porque uno no era la persona que habían elegido para jugar este Federal B. Me pidieron que me pusiese a trabajar con este grupo y sabiendo a qué venía lo hemos hecho al máximo día a día”, indicó.
Y, a continuación, remarcó: “No descarto absolutamente nada, pero de comenzar algo hay que hacerlo como corresponde porque uno ya no puede venir en otras circunstancias. Si me quedo en Alumni será para armar todo y buscar quizás con otros aires e ímpetu los objetivos”.
“A toda la gente que vino, muchísimas gracias, como así también a toda la gente que estuvo cerca nuestro, sea el cuerpo médico, utilero o cualquier persona que nos acompañó”, dijo en una especie de despedida y manifestó que “el tiempo dirá cuál será el futuro, sobre todo de Alumni, que es lo más importante más allá de los nombres y de los hombres”,
“Es un buen tiempo para pensar con tranquilidad en el futuro de Alumni. Para armar algo como corresponde, para organizarse y para los dirigentes decidir hacia dónde apuntan en todo sentido el futuro de Alumni que no está en mis manos, esa es la realidad”, concluyó.
