Mantener la cadena de frío de los alimentos ayuda a prevenir enfermedades. También hay que estar atentos a la fecha de envasado y vencimiento de los productos. Las frutas y verduras (bien lavadas) son de las mejores opciones porque no requieren refrigeración y aportan vitaminas, minerales y una importante cantidad de agua.
Estas son algunas de las recomendaciones que brindó el Consejo Municipal de la Salud a EL DIARIO, luego de ser consultada la responsable del área, Mildren del Sueldo, a raíz de la noticia que reflejó descomposturas de varias personas tras una cena de egresados.
Desde Salud remarcaron que las altas temperaturas obligan a “estar más atentos a la manera de hidratarnos y de alimentarnos y a poner mayor cuidado en la manipulación y traslado de los alimentos, en especial de aquellos que requieren refrigeración -como es el caso de leches, yogur, quesos, sándwiches y carnes-, para evitar la multiplicación de bacterias peligrosas para la salud causantes de las Enfermedades Transmitidas por Alimentos” (ETA).
En verano suele incrementarse el riesgo de contraer enfermedades transmitidas por alimentos, ya que estos son más susceptibles al desarrollo microbiano si se corta la cadena de frío.
Las ETA se producen luego de consumir alimentos o beber agua que contiene contaminantes peligrosos para la salud, manifestándose en diarreas, vómitos o dolores semejantes a los de una gripe, horas o incluso días después de la ingesta de los mismos. Este cuadro de salud es el que dijeron padecer varios consultados por EL DIARIO en los últimos días, en el marco de las averiguaciones por una presunta intoxicación en una fiesta de promoción.
El Consejo Municipal de la Salud, tomando como referencia al Ministerio de Salud de la Nación, recalcó que “es necesario tomar ciertas precauciones como una correcta higiene de los productos frescos y envasados, controlar la buena conservación de los mismos vigilando la fecha de envasado y vencimiento, así como la temperatura a la que deben ser mantenidos”.
Para la playa, los alimentos deben estar de forma segura en una heladera portátil y protegidos del sol.
Los productos que estén listos para consumir “no deben permanecer fuera de la heladera por más de una hora antes de ingerirlos, recalentarlos, refrigerarlos o congelarlos, por lo cual se recomienda desechar sobrantes de comida que hayan permanecido sin refrigeración por un tiempo mayor al señalado”, indicaron.
Además recomendaron tomar no menos de dos litros de líquido a lo largo del día en sus variantes de agua con o sin gas, así como jugos y licuados naturales de frutas o verduras. A la vez, conviene reducir el consumo de bebidas alcohólicas y cafeína e infusiones y comidas muy calientes debido a que suelen poseer alto contenido en sodio.