Angelo Valenzano, hijo de la jueza de Faltas de Villa Nueva, denunció judicialmente a la inspectora de Tránsito de la Municipalidad que lo denunciara en la Policía tras un confuso episodio, que el hombre calificó de “infeliz situación” de la que “no está exento el resto del pueblo villanovense”.
“Si bien el objetivo principal de estas palabras es reparar mi derecho al honor, también lo es manifestar públicamente la falta de protección causada por la desigualdad estructural en la que nos encontramos los transeúntes ante el ejercicio del poder por parte de los agentes de Tránsito municipales. Tal el caso que me tocó protagonizar”, dijo en primer término.
Comentó que se detuvo en el control de tránsito “tras la orden impartida intempestivamente por la agente Sabina Fabiola Alvarez”, exhibió la documentación requerida y se le informó que se iba a labrar un acta de infracción por circular sin cinturón de seguridad. “No obstante haberla firmado y aceptado la falta, le reclamé por el modo intempestivo e imprudente con el que me ordenó la detención, ya que me obligó a realizar una maniobra de frenado que puso en riesgo a los demás autos que circulaban por el lugar. Ante mi reclamo, la agente dio a entender que no tenía que hacerme problema por la infracción labrada si al fin y al cabo seguramente sería archivada por ser el hijo de la jueza de Faltas, poniendo maliciosamente en tela de juicio el desempeño de mi madre como funcionaria pública”, reveló y añadió que grabó esta situación.
Valenzano apuntó que cuando se retiraba del lugar, la trabajadora municipal simuló un evento “reprochable”, originado por “una falsa acusación que desencadenó la presencia de numerosos inspectores y oficiales de la Policía en el lugar”.
Además, agregó que “en ningún momento” expresó en el operativo ser hijo de Sosa, como señaló EL DIARIO en su edición del miércoles en base a tres fuentes.
Afirmó que “tras la escena montada”, dejó sus datos personales al personal policial y radicó una denuncia penal por abuso de autoridad en la Fiscalía de Instrucción del Tercer Turno.
“No sólo proseguiré la acción penal en su contra, sino que también solicitaré el inicio del sumario administrativo correspondiente a los fines de que se tomen las medidas disciplinarias del caso. Me considero una persona de bien, respeto la autoridad de quienes la ejercen y no acostumbro a tener que lidiar con ese tipo de absurdos; pese a ello me veo en esta situación poco feliz. La inspectora debería saber que no necesité ni necesito ser ‘el hijo de…’ para desempeñarme en mi vida personal, ni como ciudadano ni como profesional del Derecho”, consideró.
“Me tomo el atrevimiento de reflexionar públicamente y llamar a la reflexión de los lectores sobre cuán desprotegidos nos encontramos los ciudadanos ante estos controles de tránsito. Prima en ellos el abuso de autoridad de quien tiene en su poder el control de nuestra libertad, la falta de sentido común y humanidad para con nosotros, la falta absoluta de respeto como personas. No es necesario, para hacer bien la tarea que se les encomienda, poner cara de malos o tratarnos como les plazca; somos todos iguales”, evaluó.