Chiarini, quien tuvo un paso exitoso en Alumni y posteriormente en Instituto, coronó un semestre inolvidable y fue distinguido como Deportista de Oro 2014 en la Gran Fiesta del Deporte que se organiza en Oliva, ciudad donde nació hace 32 años. 

El guardameta fue uno de los dos refuerzos que llegaron a River a mitad de año, con la tarea de remplazar al saliente Chichizola y respondió siempre que lo necesitaron. Se integró al plantel de gran manera y disfrutó la obtención de la Copa Sudamericana (y la vuelta olímpica en el Monumental) junto al resto de sus compañeros.

El portero debutó en un amistoso de preparación contra Millonarios de Colombia y luego vio acción en cuatro partidos oficiales. En total disputó 328 minutos y recibió un solo gol, tal como remarcó ayer el portal del diario deportivo Olé. 

Ese gol fue en el debut por el torneo, contra Gimnasia, cuando tuvo que remplazar a Barovero por lesión. Además, jugó los 90 minutos contra Colón por octavos de Copa Argentina (atajó dos penales en la definición) y dos veces contra Rosario Central, en la segunda fecha del campeonato y en los cuartos de final de la copa.

El envión que tuvo Chiarini fue enorme. Llegó a River tras algunas temporadas de éxito bajo el arco de Instituto, aunque nada le resultó fácil.

Llegó a la “Gloria” llevado por Marcelo Bonetto, quien lo tuvo en cuenta por haberlo dirigido en Alumni, durante un torneo Argentino A.

Al club villamariense, “Julito” -como le dicen sus amigos- llegó traído por Mauricio Magistretti, y rápidamente se adaptó para terminar erigiéndose en uno de los mejores. Pero cuando llegó a Instituto, debió esperar su oportunidad.

Ahora en River, Chiarini es suplente de otro cordobés, Marcelo Barovero, quien es uno de los pilares del equipo de Marcelo Gallardo. No obstante, en el club de Núñez tienen muy en cuenta al ex-Alumni, ahora Deportista de Oro en Oliva.