Desde el 30 de diciembre de 2013 al 27 de noviembre de 2014, el Bibliomóvil, que fue cedido en comodato a la Biblioteca Municipal y Popular “Mariano Moreno” por la Comisión Nacional de Bibliotecas Populares (Conabip), recorrió 34 escuelas rurales a lo largo y a lo ancho del departamento General San Martín llevando material bibliográfico, talleres de escritura y lectura y actividades culturales.

La iniciativa del espacio municipal que encabeza Anabella Gill sirvió para que, a lo largo de 2014, se prestaran en total 1.589 libros entre las instituciones visitadas. Fueron 8.771 kilómetros recorridos, 6 ciudades, 13 localidades, 20 parajes los que recorrió el Bibliomóvil.

Con respecto a la experiencia, Gill se manifestó realmente satisfecha: “El trabajo con la ruralidad fue riquísimo porque justifica el verdadero sentido de lo que son los servicios del Bibliomóvil. Ir a un espacio donde nunca va a haber un puesto fijo como hay en las ciudades nos dejó muy satisfechos porque había chicos que realmente no sabían lo que era una biblioteca”.

En total, se realizaron 120 actividades en las escuelas rurales que se visitaron, “íbamos a cada escuela con talleres de incentivación a la lectura y con actividades musicales, en donde participaron, por ejemplo, las chicas de Piedra Papel Tijera”, contó. Entre otras actividades también se hizo la biblioteca al sol como servicio de extensión bibliotecaria, puestos de lectura y narración, actividades circenses, títeres, escuela de ajedrez, espectáculos musicales y taller de construcción de instrumentos.

A Anabella le cuesta encontrar las palabras para poder describir las sensaciones que percibió en los niños de las escuelas que visitaron. “Interés, curiosidad, que son cosas que no las ves habitualmente. Mucho cuidado, mucho afecto, ellos fueron muy agradecidos”, recordó.

“Las escuelas rurales son otro mundo”, cuenta, y detalla: “Me pasaba que es como que me metía en un lugar mágico, porque no lo podés creer, antes a las escuelas rurales iba el hijo del dueño del campo y toda la comunidad, ahora sólo va el hijo de los peones, entonces siempre son poquitos y el esfuerzo de las maestras es increíble”.

“El índice de lectura que tiene un alumno de escuela rural no lo tiene el de una escuela urbana, tienen un índice de lectura altísimo, de 10 libros como mínimo”, comparó.

Con respecto al trabajo, apuntó que “este año trabajamos la incentivación a la lectura y el acercamiento al libro, siempre llevando espectáculos, y el año que viene, si se nos renueva el préstamo, vamos a apuntar a la formación de usuarios de la biblioteca”.

La Conabip presta el Bibliomóvil a la Biblioteca Municipal hasta el 31 de marzo, aunque las intenciones son lograr que renueven el préstamo para continuar  con el proyecto. “Está medio complicado porque son nueve Bibliomóvil para más de 2 mil bibliotecas”, reconoció Anabella, quien recordó que van por el tercer préstamos del vehículo que consiguen. 

Con el Bibliomóvil también se desarrolló el servicio puerta a puerta, mediante el cual acercaron material bibliográfico a personas mayores o aquellas con dificultades para trasladarse.

“Lo que nos faltó -reconoce, Anabella- es que muchas escuelas urbanas nos pidieron que fuéramos, y no lo hicimos, pero se les explicó que para qué quieren que vayamos si tienen la biblioteca a 15 cuadras. Nosotros al Bibliomóvil lo tomamos como servicio, no como difusión para la biblioteca”, remarcó.

Durante el verano, el Bibliomóvil estará recorriendo la ciudad acercando el servicio a escuelas de verano, playones deportivos y costanera.

De visita
Algunos de los lugares que visitó el Bibliomóvil son: Etruria, Las Varas, Arroyo Algodón, La Palestina, Idiazábal, La Puerta, Camilo Aldao, Pasco, Ausonia, Morrison, La Playosa, Ana Zumarán, Las Mojarras, Montes de Los Lazos, Granja La Margarita, Colonia Santa Rosa, Villa Fiusa, entre otros.