En el comedor Caritas Felices, que en barrio La Calera contiene a más de 60 niños diariamente, la preocupación de Marisa Sánchez, encargada del espacio, es que los chicos se mantengan ocupados durante el verano.
“En enero tienen mucho más tiempo de estar en la calle, entonces hay muchas cosas que hacer para ellos, porque sus papás trabajan, no tienen escuela, tampoco el Paicor, entonces los niños quedan solos en la calle”, explicó Marisa.
Por eso, ayer desde las 19, a cargo del músico Federico Godoy, los niños iniciaron con las clases de batucada y la semana próxima harán lo propio con el taller de pintura que estará a cargo de la artista Analía Godoy.
“Los chicos están reinteresados, hace días que están enloquecidos preguntándome cuándo arrancan con la batucada”, contó Marisa, quien destacó que los niños “adoptaron este lugar como un lugar especial, pasan a la tarde y te preguntan si no tenés un bizcocho o vienen a ver la tele, tenemos libros para que lean, ellos vienen constantemente, no sólo a comer”.
La intención de la encargada del comedor Caritas Felices es que se puedan sumar más actividades, por eso es que anunció que “si alguien se quiere ofrecer a dar alguna clase, será bienvenido”.
Por otra parte, Marisa se encargó de agradecer las donaciones que recibieron para los Reyes Magos. “Muchas veces pedimos cosas, entonces también tenemos que agradecer estos gestos”, se sinceró y contó que recibieron un asado para los niños por parte de dos personas que prefirieron mantener el anonimato y regalos y juguetes de Las Iguanas Solidarias y personas particulares.