Tal como ocurre con la mayoría de ciudades de renombre alrededor del mundo, Villa María contará con su propio bus turístico. Se trata de un servicio destinado a los visitantes que lleguen a conocer las mieles de la capital del Departamento San Martín y a todos los paisanos que deseen volver a contemplarlas, pero desde una perspectiva diferente: la que convida un colectivo especialmente adaptado (con techo descapotable, proveedor de vistas privilegiadas), que recorrerá los puntos más atractivos del mapa local.
Según pudo saber EL DIARIO, habrá dos circuitos: uno que visitará las principales obras arquitectónicas de nuestra urbe (las llamadas “históricas”) y otro que desandará las bondades de la costanera. El primero comenzará a funcionar desde el próximo sábado y el segundo a partir del lunes, de acuerdo con lo informado por fuentes de la Unidad Ejecutora Villa María Deporte y Turismo SEM.
“El bus le va permitir al turista conocer algunos de los atractivos de la Villa, como lo son su costanera y sus edificios históricos. En tanto que para los villamarienses será una muy buena opción para redescubrir la ciudad, mirarla desde una panorámica distinta”, comentó en diálogo con nuestro matutino Marcos Bovo, presidente del Ente.
En concreto, el circuito histórico tendrá una duración de una hora y 15 minutos y dos horarios: a las 9.30 de la mañana y a las 19. Ambos contarán con un guía especializado, saldrán desde la Plaza Centenario y realizarán el mismo trayecto. Es decir, con inicio en la principal explanada del centro, pasando por el Subnivel y tocando las diferentes joyas arquitectónicas de la zona de avenida Sabattini y plaza San Martín (Catedral, Casona Pereira y Domínguez, Casa Meroi y Chalet Sugasti, entre otras), para luego cruzar frente a la Casa-Museo de Amadeo Sabattini, el Palacio Municipal y el Teatro Giuseppe Verdi.
Después, el tour continuará por la Universidad Popular, el Reloj de Flores y el Ex-Hotel de los Hacendados, hasta tomar la avenida costanera. Allí, el último tesoro a apreciar es el Anfiteatro, donde está prevista una de las dos paradas (la otra es en el Reloj de Flores) que proporcionará a locales y turistas la posibilidad de sacar fotos con más tiempo. Tras ello, el colectivo regresará a plaza Centenario. Esta excursión se efectuará todos los sábados del verano y hay buenas chances de que continúe en funcionamiento durante el resto del año, los domingos.
Por su parte, el bus del circuito costanero (que al igual que el histórico tiene un costo de cinco pesos y capacidad para 22 pasajeros sentados) llevará a cabo un recorrido constante, desde la zona asfaltada de Barrancas del Río hasta Vista Verde (antes del parador El Arenero). Un total de nueve kilómetros de paseo que permitirá la contemplación del Ctalamochita y su andar cansino y la movida veraniega de los distintos balnearios, incluyendo el lago. En épocas de Festival (cuando las arterias lindantes al lago se mantienen cerradas al tránsito) el servicio realizará un desvío por avenida Dante Alighieri, para volver a tocar costanera a través de calle Liniers (la continuación de Jujuy).