Nunca es tarde para el amor y para el amor no hay edad. Para muestra, cada tanto el Registro Civil de Villa María es testigo de parejas que dan el sí en el otoño de sus vidas.
Hay casos conocidos, como el del exintendente radical Horacio Cabezas con la poetisa Geroma Prado, enamorados a los 90, y otros ignotos, de igual pasión.
Ayer fue uno de esos días. A las 11, una pareja de abuelos de 83 años llegó al Salón Blanco del Palacio Municipal para dar el sí ante la ley.
Hubo muchos familiares y amigos, todos radiantes de felicidad.
EL DIARIO estuvo allí, pero el flamante matrimonio no quiso salir en nuestras páginas. “Esto es privado”, explicó el novio.
Por eso respetamos su decisión (y su derecho), pero no podíamos dejar de contar el hecho.