La Secretaría de Recursos Hídricos y Coordinación de la Provincia de Córdoba señaló que los municipios de Villa María y Villa Nueva no acataron las instrucciones que dio sobre la forma de extracción del material árido del río Ctalamochita. 

“En varias oportunidades se instruyó respecto de la forma de extracción, realizarla en forma integral en todo el tramo y no solamente en los sectores de más fácil acceso, saneando la totalidad del río, haciendo un desmalezado selectivo, retirando troncos y materiales arrastrados por las crecidas. Tales instrucciones no fueron acatadas, estimando que las empresas que realizaron el retiro de material se les pagó con este mismo material. Se desconoce el destino del material árido extraído”, indicó un documento enviado a Vecinos de la Región de la Cuenca Baja del Río Ctalamochita.

El Estado provincial hizo alusión así a los permisos precarios a ambas comunas para la limpieza y la sistematización del cauce del río Tercero, otorgado a fin de aumentar la capacidad hidráulica en dicho tramo y reducir los desbordes.

La cartera apuntó que la Provincia “propició diferentes encuentros con los técnicos de ambos municipios (ya que los mismos no conseguían unificar criterios) a fin de aunar esfuerzos, mejorar la forma de extracción y quitado del material removido de la zona del río”.

 

Las construcciones a orillas del agua

En otro tramo del escrito, suscripto por Juan Pablo Brarda, director general de Recursos Hídricos y el titular del área, Edgar Castello, se remarcó que “la vulnerabilidad de una región o comunidad varía continuamente, no sólo por variaciones o transformaciones naturales, sino también con las fluctuaciones de la población, la construcción de nuevas viviendas, carreteras, costaneras, instalaciones y otras infraestructuras”.

“La expansión urbana sin planificación o con una planificación local que no tiene en cuenta, minimiza y desconoce los riesgos de inundación hace incrementar la posibilidad de un desastre”, se destacó.

Puntualmente, los funcionarios hacen referencia a la urbanización de la zona costera local. “En la cuenca baja del río Ctalamochita, el más regulado de la provincia, se evidencia en muchas de sus localidades y en especial en las ciudades de Villa María, Villa Nueva y Bell Ville, grandes invasiones al valle fluvial de este río ocupando distintos niveles de terrazas del mismo, paleocauces, etcétera, los cuales son alcanzados por el agua ante eventos extraordinarios como los registrados en febrero y marzo pasado”.

“En la cuenca baja, desde el punto de vista geomorfológico, el río Tercero fluye sobre una planicie de inundación donde la pendiente longitudinal se reduce considerablemente, el río discurre en forma errática existiendo una gran cantidad de paleocauces o meandros (cauces antiguos) que se activan durante la crecida y que modifican la dirección del escurrimiento. Ello, sumando a la crecida, genera desbordes hacia ambas márgenes del cauce inundando zonas bajas o antiguos cauces”, detalló el informe oficial.

La Provincia añadió que efectuó medidas de tipo estructurales, como la ejecución de canales y su mantenimiento, terraplenes y obras de saneamiento en todo el territorio provincial: puntualmente en Villa María se hizo “cerca de 2 mil metros de defensa” y en Villa Nueva “se ejecutó un terraplén sobre un cauce que se desprende desde el río hacia el sur (1.400 metros de borde)”, que “resta culminarlo dado que el municipio gestiona el permiso de paso con el propietario del terreno”.

Por otro lado, la secretaría cordobesa comentó que se desarrollan una serie de estudios sobre el comportamiento del río y en sus tramos críticos que “permiten evidenciar zonas con mayor probabilidad de inundación, a fin de trazar en forma general mapas de riesgo hídrico para diferentes escenarios hidrológicos y además evaluar el efecto que genera el azud de Villa María”.

Los responsables del área aseguraron que continuamente se trabaja con pronósticos de corto (semanas) y mediano plazo (meses, trimestre). En ese aspecto, precisaron que “el programa de desembalse adoptado tiene en cuenta un principio de año hidrológico (2015) del tipo húmedo, con precipitaciones levemente superiores a las medias”. “Se monitorea de forma continua los niveles de agua en los embalses y se coordinan acciones de maniobra frente a potenciales precipitaciones en las cuencas hidrológicas de aporte a estos, definiendo dichos volúmenes de espera o de regulación de crecidas”, aclararon.

Respecto a planes de alerta, especificaron que ante maniobras de las compuertas del dique Piedras Moras, el plan de contingencia operativo se basa en dar aviso a Defensa Civil de la Provincia, mientras se está reforzado la instalación de estaciones de medición de precipitación, del nivel de Embalse de Río Tercero y determinación de curvas altura caudal en distintos sitios del río en el tramo de la cuenca media y baja.