“Nos tiene muy preocupados la denuncia que hizo la Provincia de Córdoba acerca de que ninguna de las dos municipalidades ha hecho los trabajos necesarios para evitar complicaciones como las que tuvimos por las inundaciones anteriores. Yo fui un damnificado por la creciente y me tuve que ir de mi casa”, aseguró Juan José Vagnola, presidente departamental del PRO, que reflejó su preocupación por la llegada de una nueva crecida en un diálogo mantenido con EL DIARIO.

“Ante la inquietud de la Provincia y por como está lloviendo, uno se empieza a hacer preguntas, porque hemos visto trabajar a las máquinas, pero las calles del barrio Vista Verde, en Villa María, y las de Villa Nueva son un desastre, toda esa arena que dijeron que iban a aprovechar para nivelar las calles y evitar complicaciones y la oportunidad que tuvieron los municipios de usar los áridos para mejorar el estado de nuestras ciudades, aparentemente se fue todo”, señaló. 

“Parece que las decisiones que se toman son inconsultas entre ambos intendentes, porque hay defensas de Villa María que perjudican a Villa Nueva, y la ciudad vecina, que dijo que iba a hacer defensas, no las ha hecho. Entre las preocupaciones está el llenado del lago, que está precioso, pero es inoportuno tenerlo lleno cuando estamos esperando una nueva creciente”, consideró el también precandidato a intendente de Villa Nueva.

“Sabemos que compraron bombas, pero eso significa que están esperando que nos inundemos de nuevo para usarlas para sacar el agua. El objetivo es que no nos inundemos, no que estemos preparados para la emergencia. Además se sigue construyendo pegado al río, no hay respeto por la línea de ribera, la bicisenda que sale detrás del Anfiteatro choca con el patio de una casa que da al río”, indicó.

“A los dos comités de cuenca nunca les dieron bolilla y los vecinos están desesperados. Por lo tanto reclamamos que con urgencia se hagan las obras necesarias porque ya empezaron a largar agua desde el dique, que nos den explicaciones y que cumplan con los parámetros que dio la Provincia, que es lo que deberían haber hecho durante el año”, apuntó.

 

Preguntas sin respuestas

Vagnola acompañó sus palabras con un documento que acercó a nuestra Redacción, en el que reafirma sus demandas. 

“Hemos caminado reiteradamente en los últimos meses por la ribera del río que separa los barrios de Vista Verde y de Villa Oeste, en Villa Nueva. Se trata de uno de los sectores más devastados por la última crecida que, como todos sabemos, en parte fue obra de la naturaleza y en parte de un puñado de técnicos ineptos, apañados por el Gobierno provincial que, en cualquier otro país administrado con un mínimo de seriedad, ya hubieran sido echados sin prolegómenos. 

Mientras recorríamos su costa, observamos, como tantos otros ciudadanos, montañas de arena y máquinas y vehículos de gran porte trabajando sobre ellas. Luego de un tiempo los cúmulos comenzaron a desaparecer, las grandes maquinarias se fueron y la costa empezó a mostrar un paisaje más conocido. Podríamos pensar que la Intendencia realizó otra obra ‘modelo’ en su publicitada ciudad ‘modelo’. Quizás, pero desde el PRO queremos, nuevamente, brindar a los vecinos información creíble y plantear interrogantes acerca del destino de nuestros impuestos y los manejos oscuros del Gobierno municipal ‘feudal’. Todo en forma clara y sin tecnicismos. Vamos a los hechos.

1) ¿Dónde están los informes de las nuevas defensas de las riberas del río solicitados por la Dirección de Hidráulica de la Provincia?, ¿el intendente Eduardo Accastello los tiene en mano, ha cumplimentado con esta exigencia ante la eventualidad de una nueva y desastrosa crecida?, si es así que los presente en original, los queremos ver y analizar. ¿Y el intendente de Villa Nueva, Guillermo Cavagnero, tampoco hizo los deberes o no sabe hacerlos?, parecen tal para cual.

2) ¿Dónde están los planos y proyectos de la que sería la nueva Planificación Urbana Costera para ambas ciudades, proyectando las obras que brindarían los cambios necesarios en la costa compartida para proteger a las dos poblaciones de otro desastre?, quién tenga los documentos, sea villamariense o villanovense, le agradeceríamos que los hiciera públicos. Queremos saber.

3) ¿Se han llevado a la práctica los controles de la línea de ribera que establece Hidráulica?, ¿fueron tomadas algunas medidas con respecto a la gran cantidad de construcciones en ambas costas que están dentro de los límites de este espacio público?, con sólo caminar un poco por la vera del río nos damos cuenta de inmediato que todo sigue igual. No pasó nada, digamos.

4) ¿Cuál fue el destino y las ganancias de las enormes cantidades de áridos extraídos, los contratos realizados, los montos obtenidos, las empresas y particulares involucrados? Nada sabemos. Sólo recordamos las montañas de arena junto a las máquinas, con publicidades que indicaban que eran de otras ciudades y provincias, llevándose los materiales. ¿Gratis, se los regalamos?, nada sabemos, pero el metro cúbico económico de arena cuesta unos 218 pesos. Multipliquemos por miles. ¿Buen dinero no? Bueno, no es para tanto, es sólo un poco de arena ¿no? Al fin y al cabo vivimos en una ciudad ‘modelo’ y las crecidas llegan de vez en cuando. 

Tanto lío por un poco de arena, los intendentes tienen cosas más importantes para analizar, tal como pensar qué hacer de sus vidas cuando en poco tiempo dejen sus mandatos. Quizá disfrutar de alguna playa de blancas arenas con el dinero ganado ¿no?”, dice el texto para concluir.