El Radio Club Villa María, a través de su secretario Gustavo Taboada, agradeció a los concejales de todas las bancadas y al intendente Eduardo Accastello por la celeridad con la que trataron su pedido de una sede.
Recientemente, el cuerpo legislativo conducido por Javier Suppo, aprobó una ordenanza a través de la cual cedió a Radio Club parte del edificio de Sabatini 142 de esta ciudad, en donde funcionó la administración del ferrocarril y hoy lo hace conjuntamente con Defensa Civil.
“Es un comodato por dos años pero automáticamente se renueva por otros dos cuando se cumple ese período”, contó Taboada a EL DIARIO.
La entidad fue fundada el 31 de mayo de 1984 y sus primeros pasos los dio en la planta alta del edificio de Bomberos. Horacio Cabezas, intendente de ese entonces, les dio en préstamo un local de la Terminal de Omnibus. Los socios compraron poco después el primer equipo de comunicaciones de tecnología avanzada y se instaló la primera repetidora de VHF para móviles de mano de la ciudad.
En 2004, la institución dejó la Terminal para ocupar el actual inmueble.
Taboada resaltó que este año cumplen un cuarto de siglo en la actividad y a tal fin el 30 de mayo se realizará la cena aniversario.
Con cerca de 70 socios, la entidad se apresta a realizar distintos eventos.
Hay anotados chicos de 12 años y personas mayores de 50. Algunos llegan para experimentar, porque les gusta la electrónica o porque les interesa comunicar.
Las reuniones son martes, miércoles y viernes a las 22 y los sábados a las 17. Hay cursos. Todos los interesados pueden comunicarse a los teléfonos 0353-4910014 (Gustavo) ó 0353-4521936 (Rubén Toubes, presidente).

Dejando su huella

Durante sus 24 años, Radio Club VM se dedicó a fomentar, difundir y practicar la actividad a través del dictado de cursos, participando en eventos, colaborando con actividades públicas y con ciudades y provincias que sufrieron desastres naturales, como en las inundaciones de Chaco en el 84, la erupción del volcán Hudson en el sur argentino y la voladura de la Fábrica Militar de Río Tercero, entre otras.
Más allá de las fronteras también se hicieron sentir: en un terremoto en México, se contó con una guardia permanente las 24 horas durante varias semanas.