El Banco Central de la República Argentina (BCRA) resolvió extender la línea de créditos para la inversión productiva durante el primer semestre de 2015, concentrando la totalidad del financiamiento en las Micro, Pequeñas y Medianas Empresas (Mipymes), especialmente las de menor tamaño, y promoviendo un impulso a la regionalización del crédito. Con esta decisión, la masa de crédito que se volcará a este segmento productivo ascenderá a 37,4 mil millones de pesos en el primer semestre de 2015.
En este tramo, a diferencia de los anteriores, las entidades financieras alcanzadas por la norma destinarán a esta línea, como mínimo, un monto equivalente al 6,5% de los depósitos del sector privado no financiero en pesos, calculado sobre el promedio mensual de saldos diarios del mes de noviembre de 2014. Durante 2014, el cupo de colocación fue equivalente al 5% de los depósitos en el primer semestre y al 5,5% en el segundo semestre.
Los cambios en el régimen fueron presentados en un acto realizado en el BCRA y presidido por su titular, Alejandro Vanoli (foto), del cual participaron las principales organizaciones de Pymes y empresarios de ese sector.
Al exponer en ese encuentro, el titular del BCRA destacó la necesidad de la intervención estatal para orientar el crédito. “Si uno deja librado el tema del financiamiento a las fuerzas del mercado, gran parte de las regiones del país y muchos sectores no tendrían acceso al crédito. Por eso es necesaria la regulación pública”, sostuvo Vanoli.
“Esta discusión en el mundo está absolutamente saldada. Si no hubiera regulación pública, gran parte de las regiones del país no tendría acceso al crédito. El Estado debe intervenir para compensar esa falla del mercado y lograr que el sistema financiero le preste al sector productivo. Eso se seguirá haciendo. Por otra parte, al sistema financiero no le está yendo mal: es sólido, rentable, está líquido y en perfectas condiciones para atender a sectores que no han sido debidamente atendidos”.
En el acto expusieron también el secretario de CGERA, Raúl Zylberstein; el presidente de la Asociación Pyme, Daniel Molina, y el vicepresidente de Adimra, Juan Carlos Lascurain.
Lascurain saludó la puesta en marcha de este nuevo tramo de la línea de inversión productiva y se refirió a la discusión entre Estado y mercado. “Hemos escuchado en estos días a algunos industriales o representantes de grupos industriales muy importantes discutiendo sobre Estado y mercado. También se habla de si debiéramos tener una inserción en el mundo como en los 90. Todos sabemos que de esa inserción nos tocó la parte de la tragedia”, enfatizó.
Así, el régimen que estará vigente en los primeros seis meses de 2015 contemplará que la totalidad del financiamiento que otorguen los bancos por esta línea estará destinado a las Mipymes, a una tasa máxima del 19% y a 36 meses de plazo como mínimo.
Se incluirá además un mecanismo especial orientado a impulsar la federalización del crédito, de modo que la financiación pueda llegar con mayores incentivos a las regiones con menor desarrollo económico.
Como quedó dicho, a los efectos de incentivar la colocación del crédito en las zonas menos desarrolladas desde el punto de vista económico, el importe de las financiaciones de proyectos de inversión destinados a la adquisición de bienes de capital y/o servicios a imputar a este primer tramo del cupo 2015 se calculará mediante una escala creciente para que se dirija el financiamiento hacia las zonas generalmente con menor acceso al crédito.