Ante el anuncio de varias empresas lácteas, de bajar el precio del litro de leche a partir del mes de febrero, la Sociedad Rural Villa María (SRVM), convocó a los productores lecheros de toda la región, a la reunión convocada por la Confederación de Asociaciones Rurales de la Tercera Zona (Cartez) que se concretará hoy en la Sociedad Rural de Oliva, a partir de las 17.30.
Según trascendió, el principal motivo del encuentro, será fijar una postura que posteriormente será elevada a la reunión de la Comisión de Lechería de Cartez, prevista para el próximo viernes 6 de febrero.
“Lo que haremos no será una asamblea sino una reunión ampliada, con productores de Villa María, Oliva, Los Zorros, Ucacha, Marcos Juárez y otras localidades de la cuenca lechera”, informó ayer el vicepresidente de Cartez, Gabriel De Raedemaeker.
En diálogo con EL DIARIO, De Raedemaeker sostuvo que existe “mucha preocupación” en el ámbito productivo lechero debido al accionar de las usinas lácteas que aplicarían una quita de precio de hasta el 8% en el valor de la leche entregada durante el mes de enero.
“La gente está preocupada, tiene incertidumbre y está dispuesta a resistir de todas formas este tipo de situaciones que son totalmente arbitrarias y unilaterales”, subrayó el consultado por este matutino.
“La idea es consensuar un mandato para elevar a la reunión provincial, en principio, y luego a la convocatoria que está prevista para el miércoles 11 de febrero en la sede de Confederaciones Rurales Argentina (CRA) en Buenos Aires”, apuntó.
Entre las medidas que podrían adoptar los productores se maneja una protesta de relieve nacional.
Abonando esta posibilidad, el reporteado consideró como probables las medidas de fuerza ya que existe “poca voluntad negociadora por parte de las empresas”.
“Habrá que esperar a la decisión que tome la mayoría pero como antecedente en hechos similares se pueden contar la toma de fábricas y otras acciones”, acotó.
Injusticia al desnudo
“Todo lo que está ocurriendo deja al desnudo el hecho de que el productor, eslabón principal de la cadena láctea, es el último orejón del tarro a la hora de hacer el reparto de beneficios que se obtiene por la comercialización de la leche”, manifestó De Raedemaeker.
“Los productores están participando, como máximo, en un 18% en el precio de la leche final. O sea que más del 80% restante va para el comercio, la industria y el transporte. El reparto es muy desigual”, enfatizó.
“No puede ser que el productor tenga que estar bancando la rentabilidad de todos los demás eslabones de la cadena. Me parece que la distribución debiera ser más equitativa, sobre todo pensando que la leche ya ha sido entregada a un precio convenido y al momento de ir a cobrar te quieren pagar otro monto, sin avisarte”, fundamentó.
“Nadie avisó treinta días antes que el precio iba a variar al momento de la entrega. Te informan cuando ya está todo definido y vos no tenés la posibilidad de retirar la producción”, agregó antes de remarcar para concluir que “es una situación compleja, molesta y dificultosa desde lo financiero para los productores”.