Un homicidio ocurrido en el marco de una carneada fue el dato distintivo en el plano policial y judicial que surgió al relevar la información institucional, política y organizacional de Villa Nueva para la realización del anuario de EL DIARIO, ya publicado este mes. Fue el único crimen de 2014.
Además se registró un resonante juicio que involucró a la política (ver recuadro) y se redujo la cantidad de enfrentamientos en la vía pública.
El ataque
Jesús Pedro Castro, de 53 años, falleció 24 días después de recibir un disparo de escopeta cuando era parte de una carneada que se realizaba en barrio Las Quintas.
El suceso se registró en la noche del lunes 18 de agosto en una vivienda ubicada en Las Pampas y Alfredo Palacios.
Por el hecho está detenido un hombre de 67 años. Según una fuente policial consultada ayer, “el victimario era patrón del fallecido, habían tomado mucho y aparentemente se desconocieron”. “La víctima era su empleado, lo ayudaba. Discutieron y recibió un disparo”, añadió.
El ataque se produjo en un desarmadero de autos, precisamente en una chacarita que días después visitó este diario en el marco de una nota que reflejó una nueva normativa de regulación de esos emprendimientos.
Menos violencia urbana
Por otro lado, del racconto de hechos de 2014 surgió que las peleas entre jóvenes, aunque preocupantes de por sí, no pasaron a mayores. “Años antes se habían producido varios enfrentamientos violentos entre barritas a la salida de un boliche de barrio La Floresta, pero el año pasado fue mucho más tranquilo”, confirmó un alto jefe policial, lo que condice con los registros de este matutino.
Si bien Villa Nueva tiene sólo un cuarto de la población que posee Villa María, no se puede pasar por alto la preocupante escalada de violencia urbana de su ciudad vecina y hermana, en donde hubo una veintena de heridos por ataques con armas en choques entre jóvenes a lo largo del año que pasó. En la localidad gobernada por Guillermo Cavagnero no se vivenciaron cuadros de gravedad, aunque hasta las voces oficiales consultadas por este medio admitieron que la localidad no está exenta de la violencia social.
Por caso, no mermaron las denuncias de violencia familiar y también hubo algunos episodios de golpes entre adolescentes.
“Cuando hay problemas entre barritas es difícil evitar un choque. Podemos lograr que no se produzcan en determinados lugares como la salida de un boliche, pero si están enfrentados en algún momento y en algún lugar terminan agarrándose”, graficó un policía.
Para el pastor evangélico, militante social, docente y líder del Frente Cívico, Manuel Argüello, “sería arbitrario decir que suceden más hechos violentos en otros lugares que en nuestra ciudad” y consideró que Villa Nueva hace “una unidad geopolítica” con Villa María. “Muchos chicos de Villa Nueva hacen su noche allá y muchos tienen vínculos con jóvenes villamarienses”, ilustró.
Argüello, que desde su “Campana de palo” tiene contacto social permanente, dijo llamarle la atención que “los jóvenes no puedan verbalizar y vayan directamente a los hechos”, aunque de inmediato admitió que “eso sucede en todos los órdenes y con todas las edades, tal es así que el Concejo Deliberante terminó siendo un espacio sin palabras, sin debate”.
“Somos una sociedad que va perdiendo de a poco el valor de la palabra y se cae en la acción. Sin querer, nos vamos animalizando”, advirtió.
Para la secretaria de Desarrollo Social de la Municipalidad, Eliana Onnainty, “los niveles de violencia en la sociedad son muy altos, la tolerancia y el respeto por el otro parecen actitudes fuera de lugar y nuestra ciudad no está exenta de esto”.
“No creo que la ausencia de situaciones de mayor gravedad en 2014 refleje un cambio en la estructura de la sociedad, lo que sí puedo decir es que este equipo ha estado atento y se ha ocupado de la problemática. Debemos generar espacios de contención para la niñez y la juventud -y en ese sentido se pondrá en marcha el Foro de Niños y se espera la aprobación de otra iniciativa-, trabajar con las familias en intensificar los vínculos sanos y por eso se generaron talleres desde los centros socioeducativos, continuar atendiendo la problemática del bullying y otras acciones en ese sentido”, ahondó.
“Nada cambia de un año para el otro, requiere de mucho esfuerzo y es un trabajo de hormiga que debe ser sostenido y reiterado”, recalcó.
Política y Justicia: Juicio público
El 14 de octubre, un tecnicismo jurídico le permitió la absolución al dirigente Osvaldo Soberbio en un juicio donde compareció acusado de haber amenazado de muerte al exsubsecretario de Seguridad Ciudadana, Fabián Pastorak, después de que le retuvieran el auto en un control vehicular por circular sin documentación. Fue absuelto porque los hechos de “amenazas” que se le atribuían prescribieron y por falta de pruebas en el caso de la “coacción” que se le había endilgado.