Con una mezcla constante de emociones, de festejos interminables y llantos de tristeza deportiva, y con el marco de una multitudinaria presencia de público llegados de diferentes puntos del país, concluyó ayer la 15ta. edición de la Copa Villa María o, como popularmente se lo denomina, el “Mundialito”.
Así, después de una semana de plena actividad, el campeonato de fútbol infanto-juvenil, que se desarrolla desde hace 15 años en la ciudad, bajó el telón a una edición que resultó exitosa, con la disputa de prácticamente 600 partidos, con canchas y calles pobladas de niños y adultos que, además de la competencia deportiva, le cambiaron la fisonomía a la ciudad en esta última semana.
Como en toda competencia deportiva los campeones se colmaron de felicidad al disputar un cotejo definitorio, es decir, llegar hasta el último día, es un mérito más que suficiente para sonreír, más allá de las típicas amarguras que brinda un resultado que, en este caso, debe ser anecdótico en razón de que el certamen es jugado por niños de 6 ó 7 años hasta los 14.
Entre los campeones de la edición 2015 hubo tres títulos que se quedaron en la ciudad, otros tres repartidos en equipos del interior de la provincia, uno que viajó a La Plata y el restante al extranjero, más precisamente a Paraguay. Así se distribuyeron los ocho festejos de campeón que tuvo la 15ta. edición.
En el comienzo de la tarde, el primer festejo tuvo tonada “guaraní”, ya que los niños de la 2006 de Olimpia de Paraguay lograron dar la primera vuelta olímpica al vencer al “Lobo” platense: Gimnasia; y a esa alegría se le pegó enseguida el primer festejo en cancha grande, que fue para el otro equipo que vino de esa localidad de Buenos Aires, La Plata V, que logró el título en la Clase 2003 tras vencer en los penales (empataron 1 a 1 en los minutos reglamentarios) a Barrio Industrial de nuestra ciudad.
El club de baby local, igualmente, tuvo su felicidad ya llegada la noche, porque también, tras definir en los penales, logró gritar el ¡dale campeón! en los más gurruminos, la 2007, al superar a Belgranito/TF en la única final netamente villamariense que tuvo esta edición.
Junto a dicha alegría local llegó la de Universitario que, en la 2002 logró el título al ganarle por 1-0 a Peña Boquense de La Pampa, gran protagonista del certamen. Y enseguida llegó el primer festejo del interior provincial porque Alianza General Cabrera dio la gran nota y, con una notable goleada por 5-1 ante Olimpia, celebró con total euforia el título en la 2005.
Y, de un pueblo “chiquito” de nuestro interior provincial, hubo un “Globo” que se elevó más que todos: Huracán de Las Isletillas, que logró el título en la 2001 al vencer, con sendos goles en el complemento, por 2-0 a Sur Bar de Cañada de Gómez.
Para el cierre, en tanto, hubo un festejo pintado de amarillo, ya que Vecinos Unidos de Río Tercero logró el campeonato en la 2004 al vencer, en duelo de clubes cordobeses, por la mínima diferencia a Los Lisandritos de Las Varillas, otro que efectuó un gran torneo pese al resultado final.
Y, por último, y para ponerle el broche al último día del “Mundialito”, se escucharon los festejos de otro club villamariense, más precisamente de Alumni de Villa María, que se quedó con el título en la 2000 al ganarle -con el tanto de su goleador Iván Pessuto, por 1 a 0 a Unión Casildense de Casilda.