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1 de Febrero de 2015 |
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RUGBY |
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Entre Rosario y Los Pumitas |
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Eduardo “Lolo” Bello, forward formado en el San Martín RC emigrará esta temporada al Atlético de Rosario, para jugar en el torneo de la URBA. Además, desde mañana estará concentrado con Los Pumitas M20, que se preparan para jugar el Mundial de Italia de este año |
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Eduardo Bello jugará en el mejor rugby del país, mientras sueña con jugar el Mundial M20 con el seleccionado argentino |
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"Estoy ´chocho, es una oportunidad que no quiero desaprovechar”, le dijo Eduardo “Lolo” Bello a EL DIARIO. El forward formado en el San Martín RC de esta ciudad jugará a partir de esta temporada en el Atlético de Rosario, club que forma parte de la elite del rugby argentino en el torneo de la Unión de Rugby de Buenos Aires.
El villamariense de 19 años se convertirá en el segundo jugador formado en el rugby villamariense que disputará un torneo de la URBA; el otro es el villanovense Rodrigo Bruno, que será su compañero de equipo en el Atlético de Rosario.
“Lolo” tenía todo arreglado para irse con sus amigos a Villa Gesell, pero la propuesta le hizo cambiar de idea. Ayer, llegó a la ciudad para quedarse unas pocas horas, aprovechó su tiempo para compartir este gran momento con su familia y contarle de sus sueños a EL DIARIO.
Hoy volverá a Rosario y mañana viajará a Buenos Aires, para quedar concentrado por dos semanas con el preseleccionado argentino M20.
¿Cómo se dio esta posibilidad de jugar en Atlético?
“En la última concentración que tuvimos con el seleccionado argentino en Rosario hablaba con un compañero de equipo, que es de Bolívar, y me contaba que iba a jugar en Atlético. Le pregunté cómo había hecho para vincularse y como yo quería cambiarme de club, mi compañero me dio el número del mánager. A las dos horas recibí varios llamados del club. Todos me decían que tenía las puertas abiertas, hablamos con los dirigentes, dijeron que me iban a ayudar para que me quedara en Rosario. Se dio a fines de diciembre. El viernes antes de Navidad viajamos con mi papá, charlamos con los dirigentes y cerramos todo. Yo quería que fuera lo antes posible porque luego las uniones entran en vacaciones y se podía demorar el pase. El 19 de enero empecé la pretemporada”.
¿Apostas a seguir creciendo?
“Yo entiendo que en San Martín ya había llegado a mi techo, estaba entrenando con poca gente; creo que siendo realista podemos ganarle a Palermo o al Jockey, pero igual entiendo que estaba limitado para seguir creciendo. Tal vez podría cambiarme a un club de Córdoba, pero no me gustaba la idea. La propuesta de irme a Atlético me vino justa. Me dan una mano con mi estadía que es algo clave y yo quiero estudiar Kinesiología, este año en la Universidad, y en Rosario está esa carrera. Yo estoy totalmente agradecido a San Martín por todo lo que me ha dado, más no me pudo dar y sé que algún día volveré para devolver todo lo recibido, no sé si será como jugador, como entrenador o dirigente”.
Vas a jugar en el mejor torneo de rugby del país…
“Tendré la oportunidad de jugar en el torneo de la URBA que es el de mejor nivel de rugby de América, donde cada fecha es transmitida por ESPN. Es una gran vidriera para cualquier jugador.
Lo bueno de poder jugar en Atlético de Rosario es el tener como compañeros de plantel a varios jugadores que han estado en Los Pumas o han jugado en el exterior y llegado el momento me pueden dar una mano, si tengo la posibilidad de seguir creciendo. Estuve en Rosario estas dos últimas semanas. Estoy ´chocho.´ Comparto una casa que está a dos cuadras del club junto a Rodrigo Bruno, un jugador de Bragado y otro de Bolívar. Son muy piolas los tres. Somos dos primeras líneas y dos tercera líneas. El club me dará una beca para estudiar, más todo lo otro. Es una mano terrible. Donde vivimos estamos a tres cuadras de la terminal y a dos de la sede del club”.
¿Es dura la pretemporada?
“Ahora estoy trabajando en el Pladar de Rosario (NdeR: el plan deportivo de alto rendimiento de la Unión Argentina de Rugby). Entrenamos lunes, martes, jueves y viernes desde las 7 de la mañana hasta las 11, haciendo gimnasio, rugby y físico.
El entrenamiento es bravísimo, nunca corrí tanto en mi vida. Lo hacemos una hora y media todos los días. Es la forma y la diferencia que tiene con el Pladar de Córdoba, que apunta mucho al tema del gimnasio, en Rosario le dan menos bola al gimnasio y más a lo aeróbico. Por la tarde voy un rato al gimnasio. A la vuelta de casa vive otro chico que también está en el Pladar y vamos juntos todos los días. Entrenamos en el Club Old Resian y hay seis jugadores de mi nuevo club”.
¿Qué tal es tu nuevo club?
“Vamos todos los días, la sede tiene un estilo al Sport Social de Villa María, hay pileta y muy familiero. A veces vamos a comer allá, tiene un quincho y una cancha. El anexo está como a 10 ó 15 cuadras de ese lugar”.
¿Allá vas a jugar en otro puesto?
“Sí, ahora estoy jugando de pilar derecho. En 2013, en la última concentración con la selección argentina, me dijeron que pasaba a primera de línea o quedaba afuera. Bueno, jugué dos o tres partidos. El año 2014, por una cuestión de necesidad, en el San Martín jugaba en segunda línea. Siento que todavía estoy medio crudo para ese puesto, el punto flaco que tengo por ahora es el scrum, que tengo que mejorar. Estoy trabajando para eso. Es otra mirada del rugby jugar en el torneo de la URBA. Yo formo parte del plantel superior, que tiene 60 tipos. De entrenar con 10 ó 15, ahora tengo que entrenar muy fuerte en cada entrenamiento. Acá no se puede faltar porque podés perder el puesto por varios partidos. En el rugby de Villa María, con planteles poco numerosos, se juega por necesidad y no por táctica.
Es otro nivel al que estamos acostumbrados. El rugby de Córdoba es muy bueno, pero en el que jugaré es una gran vidriera para todos, porque jugás un fin de semana con Hindú, el otro con el SIC o el CASI. Es muy parejo, hay partidos duros y no te podés confiar, porque cualquiera le gana a cualquiera”.
Como si fuera poco todo lo que estás viviendo por estos días, has recibido una citación para concentrar con Los Pumitas…
“Sí. Desde el lunes (por mañana), estaré dos semanas concentrado en Buenos Aires. Del 2 al 13 de febrero estaré entrenando con la selección, trabajando en el Club Champagnat. La segunda semana de febrero, la concentración será en Rosario, entre el 19 al 28 jugaremos un amistoso ante Gimnasia y Esgrima y luego ante Duendes, ambos de Rosario; y en marzo haremos una gira por Uruguay, aunque de eso depende si me mantengo en el plantel.
Tenía todo arreglado para irme de vacaciones con mis amigos a Villa Gesell, pero la posibilidad de llegar a Atlético de Rosario y la chance de llegar al Mundial M20 hicieron que eso quedara de lado. Más adelante me tocará. Hago lo que tengo hacer, estoy con la conciencia tranquila. Si no llego al Mundial, al menos tendré la conciencia tranquila que puse todo”.
De acuerdo a lo expresado en un parte de prensa de la UAR, a esta convocatoria han sido citados 30 jugadores, que trabajarán principalmente en el aspecto físico. El seleccionado argentino de menores de 20 años se encuentra en la recta final de su preparación con vistas al Mundial Juvenil 2015, que se disputará en el mes de junio en Italia. A fin de febrero, el equipo tendrá una nueva concentración, en Rosario, la cual contará con dos amistosos. A su vez, en marzo habrá una nueva actividad, en tanto que en abril los jugadores continuarán sus entrenamientos en sus respectivas regiones. A principios de mayo, Los Pumitas disputarán dos amistosos ante Sudáfrica, en el país, en la última actividad previa al viaje a Italia.
Contanos algo más de vos…
“Siempre jugué al rugby, lo hago desde los 9 y siempre de forward. El año 2014 fue de 10 para mí, fue muy bueno. Espero que éste sea mejor. Se jugará el Mundial, para lo que vengo pensando y trabajando hace cuatro años. Con todos los cortes que hubo en el plantel, hoy siento que estoy más cerca y quiero aprovechar esta oportunidad. Jugar el Mundial es el sueño de todo chico. Yo estoy metido en el sistema UAR, entrenando con la elite de Argentina. Lo digo sin soberbia, si uno está ahí es por algo. El primer objetivo para este año es estar en el Mundial y luego apuntar a otra cosa. El rugby argentino está muy cerca de convertirse en profesional y llegado el momento, si se da, analizaré si me conviene jugar en el exterior o quedarme en el país”.
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