Una encuesta de la consultora Management & Fit (M&F) detectó un “giro positivo” en las expectativas sobre la marcha de la economía, lo cual demuestra que “el pesimismo respecto al futuro económico de corto plazo ha cedido notoriamente”, según las conclusiones de la misma firma, que usualmente realiza estudios para el Grupo Clarín.
De acuerdo con el sondeo mensual realizado por M&F a comienzos de enero, la mayor parte de los encuestados confió en que la situación será “igual” (41% de las respuestas) o “mejor” (16%) que durante el año pasado, mientras el porcentaje de quienes esperan un deterioro en los próximos meses es “el más bajo de los últimos tres años”, pasando del 64% al 43%).
“Si bien no resulta preciso referirse a una sociedad optimista, es cierto que el pesimismo se redujo significativamente, sobre todo en los últimos meses (la caída fue de 21 puntos porcentuales desde septiembre)”, subraya la consultora.
M&F señala que “la moderación del pesimismo es una buena noticia para el Gobierno”, ya que “después de todo, la economía también funciona en base a expectativas”.
“Un mayor optimismo (o menor pesimismo, en este caso) promueve la demanda agregada y desalienta comportamientos especulativos”, añade el análisis.
Las paritarias y el consumo
Sostiene luego que “la mejora en las expectativas, si se mantiene, podría dar impulso al consumo. Sobre todo si se combina con una recomposición real de los ingresos a partir del segundo trimestre, cuando comienza el grueso de las paritarias, y cierta 'liberación' de importaciones”.
“Si el Gobierno aprovecha la oportunidad, podría dar pie a una recuperación económica, atendiendo así uno de los principales asuntos de la agenda pública”, opina M&F.
Inflación
Destaca luego que otros indicadores convalidan el cambio de expectativas reflejado en las encuestas, como es el caso de la desaceleración inflacionaria y la mayor confianza del consumidor, de acuerdo con la Universidad Torcuato Di Tella.
Por otra parte, advierte la consultora, “la 'paz cambiaria' lograda desde el nombramiento de Alejandro Vanoli al frente del BCRA permitió, gracias a la combinación de cepo cambiario y ampliación de oferta de divisas, disipar las tensiones en el mercado de cambios, satisfaciendo la demanda de dólares sin sacrificar reservas”.
“En este sentido, las expectativas de devaluación a corto plazo retrocedieron de 90% a 58%”, resalta M&F.
Por otra parte, concluye el análisis, “el ciclo electoral funciona hasta ahora como un ancla de expectativas positivo, ya que los incentivos del Gobierno por mejorar sus posibilidades en las urnas implican postergar cualquier tipo de ajuste”.