Eran los primeros días de enero cuando el titular del área de Ambiente y Desarrollo Urbano del municipio, Rodolfo Bergamasco, anunciaba que en 15 días la costanera estaría en su plenitud para que, de punta a punta, pueda ser aprovechada por los bañistas que ya se habían lanzado a las aguas del Ctalamochita para combatir el calor.
Dentro de los detalles que dio el funcionario acerca de los trabajos que se venían haciendo desde noviembre y que se iban a seguir realizando, se encontraba la promesa de recuperar el sector de la costanera del barrio Barrancas del Río. “En ese sector en particular vamos a seguir trabajando durante esta quincena para dejarlo en las mismas condiciones que están el resto de las playas”, decía en su momento. Esta equiparación con las demás, nunca se hizo.
Cuando mencionó equiparar, apuntó: “La playa ya está absolutamente utilizable, resta colocar equipamiento, como por ejemplo, bancos, mesas, tal vez alguna luminaria y cestos de basura, que son cosas que la hacen más atractiva para su utilización”.
El lugar tiene unos 200 metros y las mesas, asadores, tachos y luminaria son exactamente los mismos que ya estaban antes de su anuncio y que no se tocan desde, como mínimo, el verano pasado.
En un recorrido por el lugar se puede observar que en la parte más cercana a la playa hay seis mesas con bancos, algunas bastantes deterioradas y apenas dos asadores. En la otra punta hay tres mesas más y dos asadores. Dos de las mesas sólo tienen la base y son inutilizables y está el cadáver en escombros de lo que fue en algún momento un tercer asador.
Los fines de semana son muchas las familias que eligen ese amplio sector de espacio verde para pasar la tarde, pero los elementos que hay son escasos, por eso ante la falta de asadores algunos optan por improvisar uno con ladrillos. Los restos quedan ahí.
Sólo hay dos tachos de basura para vasta longitud de costanera y la luminaria no se amplió
“Mucha gente viene a esta parte de la costanera, pero sí vemos que hace mucho no se le hace nada”, contó una vecina de barrio, y amplió: “La verdad es que no esperaba que le hagan algo, porque cuando hicieron la nueva costanera llegaron hasta la entrada de este sector, no siguieron pero, quién te dice tengamos suerte el año que viene”.